La tragedia en la discoteca Jet Set en Santo Domingo conmocionó a la comunidad hispana dentro y fuera de la isla. Los dominicanos en Philadelphia realizaron una vigilia en Hunting Park en honor a las víctimas, demostrando que su corazón está con las familias.
La reunión empezó con un minuto de silencio por las pérdidas físicas que seuperaron las 200.
El primero en dar unas palabras fue el pastor William García. Él agradeció a los asistentes, quienes ondeaban banderas de República Dominicana y sostenían velas entre sus manos. “La comunidad dominicana es grande y está en todas partes, entonces sabemos que esta noticia sí afectó a todo el mundo”, resaltó.

Igualmente estuvo presente el representante estatal de Pennsylvania, Danilo Burgos, de origen dominicano. Pidió tener en los pensamientos a las personas que perdieron la vida en el trágico accidente, intentar respetar su legado y dejar un mundo mejor a como ellos lo encontraron.
Luego, los asistentes entonaron la canción más insigne de Rubby Pérez “Volveré”, no solo en honor al merenguero, sino a los afectados, sus familiares y a quienes están lejos de su patria.
“Estamos dándonos un abrazo solidario. Donde quiera que haya un dominicano, que vio lo que pasó en nuestro país, ha llorado, todos hemos llorado, todos estamos tristes. La República Dominicana está pasando por uno de los peores momentos de su historia y nosotros aquí estamos para darle un abrazo solidario a nuestros hermanos”, afirmó Franklin Medrano, presidente de Cámara de Comercio Dominicana.
Por su parte, Nieves Sosa, en representación de la asociación y colegio de psicólogos en Santo Domingo, dijo que están en la disposición de ayudar a todas las personas que lo necesiten.
“En este día me uno a al comunidad dominicana, al pueblo dominicano en el dolor que nos invade en esta terrible tragedia”, mencionó, a su vez, el pastor Gabriel Castro.

“En este momento vamos a respetar y recordar las vidas de las personas tan especiales que perdimos. Mientras más pasan los días, vamos a seguir recordándolos, van a ser días muy difíciles, pero a la misma vez, vamos a pensar en las cosas bellas en las que ellos contribuyeron y también la experiencia. Muchos tenemos memoria de ese lugar, pasamos muchas noches lindas ahí. También hay que recordar a los empleados: meseros, meseras, que estaban trabajando, haciendo lo que podían para llevar alimentos a sus familias”, dijo Antonio Valdés, director ejecutivo del Children’s Crisis Treatment Center (CCTC).
Entre los asistentes también estuvieron Miguel Peralta, presidente del Desfile y Festival Dominicano de Philadelphia y otros líderes comunitarios. La vigilia finalizó con los asistentes cantando “Buscando sus besos”, del maestro Pérez.

Un dolor sinigual
Aún desde el aire puede verse el agujero que dejó el techo colapsado de la discoteca y en el medio máquinas de aire acondicionado y plantas eléctricas que pesaban toneladas.
Más de 300 socorristas trabajaron por 59 horas continuas para buscar sobrevivientes y recuperar cadáveres. Recibieron apoyo de perros especializados, así como maquinaria para mover escombros.
Los días jueves y viernes se realizaron funerales en Santo Domingo, la vecina Haina y Neyba, a 200 km de la capital.
El gobierno anunció una comisión de expertos nacionales y del extranjero para investigar las causas de la que se considera la mayor tragedia de los últimos años en el país caribeño.
Con información de: AFP