Una fuerte tormenta de granizo cayó el martes por la tarde en Cataluña, España y provocó la muerte de una bebé de 20 meses a causa de una herida en la cabeza producida por el impacto de una bola de hielo.
Las piedras de granizo de la tormenta -algunas de las cuales tenían un tamaño de hasta 10 cm de diámetro- destruyeron ventanas, techos y líneas de tendido eléctrico. El fenómeno ocurrido en la provincia de Girona -que se prolongó por poco más de diez minutos- dejó también decenas de heridos.
«Le cayó una piedra en la cabeza» y «desgraciadamente no lo ha podido superar», explicó a la emisora de radio catalana RAC1 Carme Vall, regidora del ayuntamiento de La Bisbal d’Empordà, el pueblo cercano a Girona que sufrió la inusual tormenta con granizo.
«Ha fallecido la niña, que tenía 20 meses, en nuestro hospital, durante la noche», confirmó el Hospital Josep Trueta de Girona, al que fue trasladada la bebé.
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Una investigación publicada por BBC Mundo, aseguró que cada vez serán más frecuentes este tipo de tormentas. «Y es que el cambio climático está alterando el patrón de las tormentas de granizo. En Texas, Colorado y Alabama, en Estados Unidos, el récord por las piedras de granizo más grandes fue superado en los últimos tres años, con bolas de hielo que alcanzaron los 16 cm. En 2020 en Tripoli, la capital de Libia, cayó granizo de hasta 18 cm».
El cambio climático afecta la temperatura de la atmósfera terrestre, «también cambia la cantidad de humedad en el aire. El aire más cálido puede contener más vapor de agua, mientras que las temperaturas más altas también significan que se evapora más agua de la superficie de la Tierra. Se cree que esto conducirá a lluvias más intensas y tormentas más extremas en algunas partes del mundo», continúa la investigación.
Ahora bien, la piedra de granizo más pesada jamás registrada cayó en el distrito de Gopalganj de Bangladesh en 1986, con un peso de 1,02 kg.