El presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, dijo que enviará tan pronto asuma el poder el 10 de diciembre, un proyecto de ley al Parlamento para ponerle fin a la penalización del aborto.
“Va a haber un proyecto de ley mandado por el Presidente. Tan pronto lleguemos. Voy a intentar que salga cuanto antes. No depende solo de mí”, adelantó a través de una entrevista con el diario Página/12 publicada este domingo 17 de noviembre.
El político no aclaró detalles sobre si buscará solo despenalizar la práctica o además intentará legalizarla, como reclaman algunos movimientos femeninos. En Argentina el aborto solo está autorizado cuando el embarazo es producto de una violación o si está en peligro la vida de la madre.
Fernández llamó a discutir el tema y apuntó que “cuando uno despenaliza y legaliza el aborto, no lo hace obligatorio” y agregó que “quisiera que el debate no sea una disputa entre progresistas y conservadores, entre revolucionarios y retrógrados. Éste es un problema de la salud pública que debemos resolver y que hay que asumirlo así”.
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El mandatario electo asistió esta semana a la presentación del libro “Somos Belén”, de la periodista Ana Correa, que relata el padecimiento de una joven que estuvo presa 29 meses hasta 2016 en el norte del país, acusada de practicarse una interrupción voluntaria de embarazo tras sufrir un aborto espontáneo. Allí el líder peronista posó rodeado de mujeres con pañuelo verde, símbolo de la lucha por la legalización del aborto.
“Debemos respetar tanto a la mujer que siente que es un derecho sobre su cuerpo como a la mujer que siente que Dios no le permite hacerlo”, dijo Fernández. En 2018, enmarcado por multitudinarias movilizaciones de mujeres, por primera vez se debatió un proyecto de aborto legal en el Congreso argentino. Fue aprobado por los diputados pero rechazado por el Senado, tradicionalmente más conservador.
Se estima que en Argentina se realizan unos 500 mil abortos al año y que un centenar de mujeres mueren por las prácticas hechas en clandestinidad.