Tras una gran avalancha de pasajeros que auguraba el paulatino retorno a la normalidad en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA), la variante Ómicron echó todo a perder.
El aeródromo ahora registra una disminución de 20.000 pasajeros al día, en lo que va de año. A pesar de ser uno de los aeropuertos menos afectados del país por la falta de personal y las condiciones climatológicas adversas, la merma es considerable, aseguró Indira Almeida, vocera de la terminal aérea.
El 3 y 4 de enero debían ser los días de mayor volumen de pasajeros del período festivo de Navidad y Año Nuevo, que comenzó 21 de diciembre. Pero el lunes 3 de enero, se produjeron 49 cancelaciones. De ellas 27 de vuelos de llegadas y 22 de salidas. Mientras que 24 aeronaves sufrieron retrasos.
“La mayoría de las cancelaciones suceden en los vuelos procedentes de Chicago y de Nueva York, dos áreas afectadas por las condiciones meteorológicas adversas”, señaló la vocera.
En la ciudad de Chicago, por ejemplo, se registró la primera tormenta de nieve de la temporada que dejó en tierra cientos de vuelos. En otras ciudades también se reportaron inconvenientes.
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El domingo 2 de enero, de un total de 1.009 vuelos previstos para ese día, MIA registró 28 cancelaciones de llegadas y 52 de salidas. Mientras que el número de vuelos retrasados alcanzó los 414, entre salidas y llegadas. “De todas las cancelaciones, 26 fueron originadas por falta de personal”, explicó Almeida.
La variante Ómicron ha provocado que cientos de empleados aeroportuarios se reporten enfermos. La ausencia de los trabajadores influye en la operatividad del aeropuerto.
Sorteando las dificultades
El 1 de enero de 2022 se movilizaron 131.997 pasajeros, mientras que ese mismo día del 2020, volaron unos 157.000 viajeros. “Hay una diferencia de casi 20.000 pasajeros debido a las cancelaciones que se están registrando. Algo que no había pasado, hasta ahora. MIA estaba superando el volumen de pasajeros que movía antes de la pandemia”, comentó Almeida.
Las autoridades de MIA observan con preocupación el declive en el número de viajeros. El 19 de diciembre fue la jornada en la que se registró el mayor volumen en la historia del aeropuerto. Ese día se sobrepasó la cifra de 165.000 pasajeros.
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Además de las dificultades derivadas por la pandemia, se añaden las complicaciones con el parqueo en el aeropuerto por falta de espacio. Muchos pasajeros que llegaban en auto fueron enviados a parquear fuera de las instalaciones de la terminal aérea. El estacionamiento en el aeropuerto está limitado debido a un nuevo sistema de pago el cual debe entrar en funcionamiento a finales de enero.
Por ello las autoridades del aeropuerto sugieren a los pasajeros utilizar taxis o que pidan a un familiar o amigo los lleve y recoja. También pueden usar la línea naranja del Metrorail, que la renovaron hace muy poco.
Además se aconseja a quienes pretendan viajar, comprobar el estatus de su vuelo 24 horas antes. Se espera que en el transcurso de las próximas semanas la situación se solvente.