El acoso escolar o bullying es un fenómeno que se ha intensificado con los años, pese a los esfuerzos de muchas instituciones y campañas educativas de erradicarlo. Cuando se habla de acoso se hace referencia a toda conducta de agresión física y/o psicológica, como las conductas de exclusión social, insultos, difusión de rumores, desaparición de artículos escolares, entre otras actitudes. Las realizan uno o más estudiantes contra otro u otros.
«El acoso, como todo acto de violencia, implica que un sujeto somete a otro u otros para demostrar su poder y capacidad de controlar a los demás, ejerciendo así el liderazgo en el grupo, de modo que los demás niños y adolescentes del aula deciden seguirlo o hacerse cómplice de sus ataques por temor a convertirse en una víctima más y ser también excluidos», explicó un informe de la Universidad Católica Andrés Bello de Venezuela.
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Ahora, un nuevo informe mostró un aumento alarmante del acoso escolar en las escuelas de Nueva Jersey. Los incidentes se han cuadruplicado entre 2018 y 2023.
El Grupo de Trabajo Anti-Bullying del estado recopiló cifras donde se investigaron más de 19.000 incidentes de acoso e intimidación. De esa cifra, se confirmaron 7.600 incidentes, la cifra más alta desde que el estado comenzó a monitorear el acoso en las escuelas.
El informe también mostró que el acoso físico disminuyó, pero el acoso verbal y cibernético sigue aumentando. Si bien el grupo de trabajo aplaudió al estado por sus medidas para apoyar las aulas inclusivas, también recomendó que las escuelas necesiten fondos y recursos adicionales para combatir el acoso.
¿Quiénes son víctimas?
Algunos estudios han demostrado que el victimario selecciona como víctima a todo aquel o aquella que no demuestre interés por seguirlo como líder, pero son los niños, niñas o adolescentes emocionalmente vulnerables, los que caen en el juego y se convierten en blancos reiterados.
El año pasado, en el Distrito Escolar Regional Central en el condado de Ocean, una adolescente se suicidó después de que su familia asegurara que fue intimidada en la escuela y en línea. Sus padres decidieron demandar al distrito.
Adriana Kuch tenía 14 años cuando murió en febrero de 2023. Su padre, Michael Kuch contó que la joven se quitó la vida después de que se publicara un video inquietante en las redes sociales que la mostraba siendo atacada mientras caminaba en el pasillo de Central Regional High School en Berkeley Township. El acoso siguió y siguió, la familia de la joven contó que muchas autoridades escolares lo sabían y le dijeron a CBS que existía una «cultura de violencia».
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