La prioridad de la coalición internacional que respalda al presidente interino de Venezuela Juan Guiadó, tiene como meta inmediata hacer que este 23 de febrero entre al país la ayuda humanitaria que está acopiada en la frontera con Colombia.
El propósito fue expuesto por el representante de la presidencia interina en los Estados Unidos, Carlos Vecchio, quien en su discurso de apertura en el marco de la Conferencia Mundial de la Crisis Humanitaria en Venezuela dijo que “ya basta” a las tropelías y desmanes que se le endilgan a la administración de Nicolás Maduro.
El evento que se desarrolla en Washington es una iniciativa de Luis Almagro, quien hace uso de la sede de la OEA para reunir a la coalición de países que respaldan a Guaidó y que han argumentado la etiqueta de usurpador a quien consideran el dictador de Venezuela, Nicolás Maduro.
Como otro punto importante dentro del marco logístico para el logro de la entrada al país suramericano de la ayuda humanitaria, está que Vecchio expresó, que las labores de asistencia solo se verían cristalizadas si “se produce un cambio en la jefatura del Estado”.
Los datos colocan una tensión en el juego diplomático y en la táctica geopolítica debido a que el Gobierno de Venezuela aún bajo las riendas de Nicolás Maduro ha dicho que no entrará al país la ayuda humanitaria acopiada en varios puntos de las múltiples fronteras que tiene Venezuela.
Durante el evento de hoy es menester recapitular que Vecchio se encargó de dar el discurso inaugural de la cita, que reúne a expertos, diplomáticos y empresarios de más de 60 países, entre ellos Colombia, EE.UU., Perú, España, Francia y Alemania.
“La razón de nuestra lucha no es otra que parar el dolor y el sufrimiento del pueblo de Venezuela. ¡Ya basta! Es suficiente, ha sido demasiado el dolor, demasiado”, subrayó Vecchio desde un podio custodiado por dos grandes banderas venezolanas y frente a más de un centenar de personas.
Vecchio explicó que esta es la “coalición internacional” de la que había hablado Guaidó para hacer llegar ayuda humanitaria en Venezuela a pesar de la negativa del gobernante Nicolás Maduro, quien considera que la asistencia conllevaría una invasión armada al su país.
Frente a ello, Vecchio afirmó que la “prioridad” es hacer entrar la ayuda en Venezuela el 23 de febrero, fecha fijada por Guaidó para su ingreso, y atacó al Gobierno de Maduro por “ignorar” y “usar” la crisis humanitaria, mientras se lucra con beneficios obtenidos por la “corrupción”.
“Mientras ellos cierran las puertas a la ayuda humanitaria, nosotros tenemos que abrir miles de ventanas para hacer llegar la ayuda humanitaria a Venezuela, es muy fácil, ¿por qué la bloquean? Ellos no la necesitan, el pueblo sí la necesita, este es el drama que estamos viviendo”, dijo.
Ubicado en perspectiva, Vecchio consideró que la crisis en Venezuela no podrá solucionarse si no se produce un cambio en la jefatura del Estado, actualmente ocupada por Maduro, quien tomó posesión el 10 de enero como fruto de unas elecciones celebradas el pasado mayo y que no fueron reconocidas por parte de la comunidad internacional.
“Si la usurpación continúa en Venezuela, esto será mucho peor, no en Venezuela, sino en toda la región”, aseguró.
En la conferencia participan representantes de algunos de los países que más migrantes y refugiados venezolanos han recibido en los últimos años, como Colombia y Brasil.