El paso de Twitter de los 140 a los 280 caracteres resultó ser uno de los mayores cambios que ha sufrido la plataforma. Parte de la señal de identidad de Twitter era la brevedad de los tuits, que obligaban a ser conciso y a sintetizar la información lo máximo posible.
Un año después del cambio, la compañía ha publicado una serie de datos sobre cómo ha evolucionado la red social a raíz del aumento de caracteres, y todos parecen indicar que fue la decisión correcta.
En primer lugar, cuando el límite era 140 caracteres, el 9% de los tuits llegaban al máximo de caracteres. Tras el cambio, solo el 1% llega al límite impuesto por los 240 caracteres. De hecho, solo el 12% de los tuits supera el límite original de 140 caracteres.
Esto significa que a pesar de todo el espacio disponible que supusieron los 140 caracteres extra, los tuits siguen teniendo en su mayor parte el mismo formato que tenían antes del cambio. Pero lo que más ha cambiado ha sido el contenido de los tuits.
Fuente:www.trecebits.com