En los Estados Unidos es la segunda vez que se habla de una tentativa de golpe de Estado y esta vez proviene del propio presidente Donald Trump quien ha dicho que la investigación de la supuesta trama rusa fue un intento para defenestrarlo.
Bajo esa óptica el Jefe de Estado aseguró ayer que está a favor de que el Departamento de Justicia investigue esa hipótesis, debido a que no se puede tolerar que grupos políticos tomen atajos solo por la idea de no coincidir con la forma de guiar al país que emana de la Casa Blanca.
El presidente dijo que la averiguación de la llamada trama rusa, liderada por el fiscal especial Robert Mueller, “era una investigación ilegal, que comenzó de manera ilegal; todo en ella era corrupto. Fue un intento de golpe y los vencimos”, declaró Trump este miércoles poco antes de partir rumbo a Texas, donde tiene previsto participar en varios actos.
El mandatario sostuvo que, a pesar de que la investigación fue llevada a cabo por gente que “realmente” lo odia, la pesquisa no ha hallado pruebas de que su equipo de campaña conspirara con el Kremlin para proclamarse vencedor en las elecciones de 2016 ni de que él mismo cometiera un delito de obstrucción a la Justicia.
“Lo que han hecho fue una traición, lo que hicieron fue terrible, lo que hicieron fue contrario a la Constitución y a todo aquello en lo que creemos”, afirmó el Presidente.
La primera vez que se habló de defenestración en la administración Trump fue en el caso de la columna anónima publicada por “un funcionario del gobierno de Estados Unidos” en The New York Times el año pasado.
El material llegó a ser lo más sonado en la prensa mundial y coincidió con la publicación de fragmentos de un libro del periodista Bob Woodward, en el que se sugiere que altos funcionarios de la Casa Blanca han estado involucrados en un “golpe de estado administrativo” para proteger a la nación de las acciones del presidente.
Sobre la misma base de conflicto hoy el presidente Trump reiteró que no ha leído el informe Mueller y aseguró no tener interés en hacerlo, ya que, dijo, tiene otros muchos temas de los que ocuparse.
“Por lo que a mí respecta, no me importa el informe de Mueller, he sido plenamente exonerado. Ni conspiración, ni obstrucción. Tengo que encargarme de China, de Corea del Norte, de Venezuela y de todos los problemas en este mundo”, justificó.