Shohei Ohtani, la superestrella japonesa de béisbol, poseedor de dos premios MVP de las grandes ligas confirmó su fichaje por los Los Angeles Dodgers en un acuerdo valorado en 700 millones de dólares por 10 años.
La la magnitud de este contrato eclipsa cada uno de los acuerdos firmados por jugador alguno en la historia de la Major League Baseball (MLB), superando el que hasta el momento era el contrato más grande por volumen (no por salario anual) total en las Grandes Ligas, ostentado por su ex compañero Mike Trout, quien en 2019 firmó por 426,5 millones de dólares con los Los Angeles Angels.
“He decidido elegir a los Dodgers como mi siguiente equipo”, dijo Ohtani, de 29 años, en un mensaje en su cuenta de Instagram con el que terminan semanas de especulaciones sobre su futuro.
El japonés, llamado “el unicornio del beisbol”, es un pelotero con un talento único para batear y lanzar, que ahora abandona a Los Angeles Angels la franquicia para la que jugó desde su llegada a la Gran Carpa en 2018.
Los Dodgers, que obtuvieron su último título en el 2020, lograron cautivar al agente libre más codiciado de los últimos tiempos con una oferta que, según dice el agente de Ohtani, alcanzará los 700 millones de dólares en 10 años.
Es un “contrato histórico único, para un jugador histórico único, y Shohei está encantado de formar parte de la organización de los Dodgers”, dijo en un comunicado el agente del japonés, Nez Balelo.
El promedio anual de su salario, 70 millones de dólares, es más del doble del que recibía de los Los Angeles Angels y un 62% más alto a los mayores sueldos anuales de la liga, que son los 43,3 millones que reciben los lanzadores Max Scherzer de Texas Rangers y Justin Verlander de Houston Astros.
En monto total, el mayor contrato en la MLB era hasta ahora era el que le firmaron en 2019 precisamente los Angelinos a Mike Trout por 426 millones de dólares por 12 años.
En la NBA, el mayor sueldo anual de esta campaña lo recibe el base Stephen Curry de los Golden State Warriors, con 51,9 millones de dólares, y en la NFL el ‘quarterback’ Joe Burrow de los Cincinnati Bengals, con 55 millones de dólares.
En las últimas semanas, el futuro de Ohtani fue asociado a numerosos equipos como los Toronto Blue Jays o los Texas Rangers, campeones vigentes.
Pero definitivamente el japonés eligió permanecer en Los Angeles, California y compartir vestuario con otros astros de los Dodgers como Mookie Betts.
“A todos los aficionados y a todas las personas involucradas en el mundo del béisbol, les pido disculpas por haber tardado tanto en tomar una decisión”, escribió Ohtani en sus redes sociales.
“Me comprometo a hacer siempre lo mejor para el equipo y a seguir dándolo todo para ser la mejor versión de mí mismo. Hasta el último día de mi carrera como jugador, quiero seguir esforzándome, no sólo por los Dodgers, sino por el mundo del béisbol”, afirmó.
Doblemente único
Ohtani ha sido una de las grandes sensaciones del béisbol norteamericano desde que llegó a la liga en 2018, con su combinación insólita de lanzamiento de élite y destreza de bateo que le ha valido comparaciones con el mítico Babe Ruth.
Aunque su talento no fue suficiente para llevar a la clasificación de playoofs a los Los Angeles Angels, que se dice es una franquicia en decadencia, Ohtani no ha dejado de acaparar estadísticas y galardones individuales.
Este “unicornio del béisbol” es el único jugador en ganar dos premios al Jugador Más Valioso (MVP) de forma unánime, el de 2021 y el de esta pasada temporada en la Liga Americana.
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La estrella de Los Angeles Angels protagonizó una campaña extraordinaria aunque no pudo concluir el año por una lesión en el codo derecho sufrida en agosto y otra en el oblicuo derecho en septiembre.
Ohtani acumuló 44 jonrones, 20 bases robadas y 95 carreras empujadas y también brilló en el montículo con el porcentaje de bateo en contra más bajo (.184) entre todos los lanzadores de la Liga Americana con por lo menos 130 entradas lanzadas.
El japonés fue convocado al Juego de las Estrellas como lanzador y bateador designado por tercera temporada consecutiva.