El presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, firmaron un preacuerdo para conformar un Gobierno de coalición este martes 12 de noviembre.
Dicho Gobierno de coalición, que los partidos involucrados ya habían intentado infructuosamente hace varios meses, necesitará del apoyo de otros partidos para lograr la aprobación de la cámara baja, renovada en las elecciones legislativas realizadas el domingo pasado.
“Hemos alcanzado un preacuerdo para conformar un Gobierno de coalición progresista en España, que combine la experiencia del Partido Socialista con la valentía de Podemos”, dijo Iglesias, tras la sorpresiva firma del documento en el Parlamento español.
Iglesias, que se prevé como vicepresidente de ese Gobierno, aseguró que Sánchez puede contar con “toda la lealtad” por parte de su organización, cuyos miembros darán “lo mejor” de sí en el Ejecutivo.
El nuevo Gobierno, si cuenta con el aval del Congreso, tendrá como prioridades afrontar la crisis territorial y la justicia social como “la mejor vacuna contra la extrema derecha”, dijo Iglesias.
Tras agradecer a Sánchez su “generosidad y disposición”, el líder de Unidas Podemos destacó que “es tiempo de dejar atrás cualquier reproche” para “trabajar codo con codo en esta tarea histórica”.
Por su parte, Sánchez dijo que a partir de ahora el PSOE abrirá una ronda con el resto de los grupos para conseguir mayoría parlamentaria. Además insistió en que este Gobierno será “rotundamente progresista”, porque estará integrado por el PSOE y Unidas Podemos “y va a trabajar por el futuro de España”.
“Lo que nunca cabrá en el espíritu del futuro Gobierno será el odio y la confrontación entre españoles”, dijo el líder socialista, quien recordó que su compromiso es lograr un Gobierno progresista “sí o sí”.
Sánchez también subrayó que, para el desempeño de las distintas responsabilidades de Gobierno, “la cohesión, la lealtad, la solidaridad gubernamental y la voluntad de aprovechar los perfiles más idóneos” presidirán el acuerdo.
Además, dijo que el pacto nace con el propósito de abrirse a otras fuerzas políticas para hacer viable una mayoría estable que permita “no sólo una investidura, también una legislatura”.
Consolidar el crecimiento y la creación de empleo, garantizar la convivencia en Cataluña, trabajar por la regeneración y contra la corrupción; luchar contra el cambio climático; garantizar el derecho a una muerte digna o revertir la despoblación en la España vaciada, figuran entre los compromisos que Sánchez e Iglesias firmaron en el Congreso de los Diputados.
Tras la firma y sus breves discursos, ambos han sellado el pacto con un abrazo.