Los propietarios hispanos han logrado avances en la reducción de la brecha en el valor de las viviendas con respecto a los propietarios blancos en los últimos dos años, recuperando el terreno perdido durante la pandemia por Covid-19. La brecha es ahora la más estrecha jamás observada.
Según los nuevos datos de la empresa de bienes raícesZillow, las viviendas de propiedad hispana valen actualmente un 11,9% menos que las de propiedad de hogares blancos no hispanos, una reducción respecto del 12,1% del año pasado y un máximo reciente del 12,4% en diciembre de 2021.
La brecha era tan amplia como el 18% en 2012, tras la crisis financiera mundial de 2007-2009, cuando muchas comunidades minoritarias se vieron especialmente afectadas, lo que retrasó el progreso varios años. La lenta recuperación continuó de forma constante hasta que se interrumpió en 2021, pero ahora se ha corregido el rumbo.
La mayor parte de la riqueza de los propietarios hispanos está vinculada a su residencia principal, en comparación con los propietarios de otras razas, por lo que las fluctuaciones del valor de la vivienda tienen un efecto descomunal sobre ellos. Existe un movimiento positivo hacia la equidad a nivel local.
Más de dos tercios de las 100 áreas metropolitanas más grandes vieron disminuir la brecha del valor de la vivienda para los propietarios hispanos durante el año pasado. “Se observaron reducciones significativas en varios grandes mercados de Florida, incluyendo Miami, Orlando y Tampa”, precisó la empresa de bienes raíces
Varias áreas metropolitanas con brechas en el valor de las viviendas entre hispanos y blancos mayores que el promedio también vieron cómo se reducían.
Los Ángeles tiene la brecha más grande en el valor de las viviendas, con valores en un 32% más bajos para los residentes hispanos en comparación con los residentes blancos. La brecha en esa área metropolitana se redujo en 0,75 puntos porcentuales en el último año.
Salto a la propiedad de vivienda sigue siendo un obstáculo
Aunque se está avanzando gradualmente en el cierre de la brecha, el salto a la propiedad de una vivienda sigue siendo un obstáculo importante. Según el Informe de tendencias de vivienda del consumidor de 2024 de Zillow, los hispanos representan el 18% de los posibles compradores, pero el 13% de los compradores exitosos.
Los datos de la Ley de divulgación de hipotecas para propietarios de viviendas muestran que los hispanos enfrentan tarifas más altas al comprar una vivienda, con un promedio de $2,812 en comparación con el promedio nacional de $2,072.
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Las tasas de denegación de hipotecas también son notablemente más altas para los prestatarios hispanos, con un 18,8% experimentando denegaciones en comparación con el 10% de los blancos no hispanos, a menudo debido a las elevadas relaciones deuda-ingresos, que representan el 38% de las negativas.
Los esfuerzos para mejorar el acceso a la asistencia para el pago inicial, los programas de creación de crédito, las reformas de zonificación y la construcción y conservación de viviendas asequibles en áreas deseables son iniciativas claves para ayudar a que el progreso continúe.