Toyota ha puesto en marcha el desarrollo de una versión de su pick-up Hilux, para que esta se impulse con un motor eléctrico alimentado por combustible de hidrógeno.
El fabricante trabajará conjuntamente con otras compañías inglesas como Thatcham Research, Ricardo, ETL y D2H, todas especializadas en hidrógeno e ingeniería aplicada a esa tecnología. Buscarán adaptar el sistema de FuelCell actual utilizado en el Toyota Mirai, a las exigencias de un vehículo utilitario de las características de la Hilux.
Toyota Mirai nació en el 2014. Es el primer auto de producción propulsado por un motor eléctrico alimentado por hidrólisis inversa del hidrógeno para convertirse en electricidad para cargar la batería.

Se estima que el nuevo plan del fabricante comience en 2023 con el diseño de varios prototipos diferentes. Una vez evaluados todos los aspectos, tanto funcionales como de desempeño, se comenzará con la producción de un número reducido de unidades equipadas con esta tecnología.
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El proyecto incluiría inicialmente una pick-up de cabina simple, especialmente por la necesidad de colocar los tubos de hidrógeno en el centro de la carrocería, de modo que no resten capacidad de carga ni comodidad de los pasajeros de las plazas principales.
La aplicación de este producto está pensada para el trabajo pesado de cargas y no para paseo, la cabina doble no sería el producto más apropiado y generaría complicaciones de diseño.
Toyota es una de las compañías automotrices con mayor experiencia en el uso del hidrógeno como combustible.