Un desafío legal en Pensilvania sobre la viabilidad del sistema de votación de un fabricante en particular ha terminado. Luego de un acuerdo, se informará públicamente los problemas con las máquinas de votación.
Rich Garella demandó a Pensilvania en 2019 junto con la Coalición Nacional de Defensa Electoral, Ciudadanos para Mejores Elecciones y otras 12 personas.
“Una verdadera transparencia y rendición de cuentas, es un gran avance”, expresó Garella sobre el acuerdo alcanzado.
Los defensores de la seguridad electoral que demandaron alegaron que tal requisito proporcionará una cuenta contemporánea de qué máquinas de votación están funcionando bien y cuáles no, información que puede beneficiar no solo a Pensilvania, sino también a todos los estados.

Algunos funcionarios electorales también ven el potencial de ayudar a suprimir las teorías de conspiración y la desinformación sobre el mal funcionamiento de la máquina de votación que puede registrarse durante un proceso electoral y en los días posteriores a que se cuentan los votos.
Otros se preocupan, sin embargo, por la amplitud de lo que se debe informar y si podría usarse para socavar la confianza en las elecciones, ya que Pensilvania es un estado clave del campo de batalla presidencial.
La Federal Electoral Assistance Commission requiere que los fabricantes le informen de los fallos de funcionamiento, pero los grupos y defensores que demandaron a Pensilvania dicen que no eran conscientes de un requisito de información pública similar a nivel estatal.
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En una declaración, el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, aseguró que el acuerdo proporcionará transparencia pública adicional en los sistemas de votación utilizados en el estado.
El acuerdo fue presentado en el tribunal la semana pasada, mientras que la demanda original fue presentada a finales de 2019, la cual surgió de quejas sobre el sistema de pantalla táctil ExpressVote XL fabricado por Election Systems & Software, con sede en Omaha, Nebraska, que acababa de ser comprado por tres jurisdicciones de Pensilvania, incluyendo Filadelfia.
Semanas antes de la demanda, ES&S había dicho que los rendimientos muy subestimados en una carrera judicial en el condado de Northampton de Pensilvania fueron el resultado de errores humanos en el formato de la boleta electoral.