La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, se oponía, hasta la semana pasada, a poner en marcha el mecanismo que podría culminar en la destitución del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como se lo solicitaba un grupo de legisladores del Partido Demócrata.
Sin embargo, Pelosi dijo en una entrevista con el canal NBC que haber lanzado el procedimiento de investigación formal para el “impeachment” del presidente Donald Trump “no es causa de regocijo” y que Trump, con su comportamiento, “no nos dejó opción”.
“Tenemos que poner el país antes que el partido muy claramente ante la vista del público”, aseguró Pelosi en la primera entrevista que concede a los medios desde que el martes anunciara la investigación contra Donald Trump por la llamada telefónica que hizo a su colega de Ucrania, Volodímir Zelenski, en la que le pidió investigar al ex vicepresidente Joe Biden.
“Esto es lo más serio que hay, cuando se trata de proteger la Constitución de los Estados Unidos. (Trump) Está poniendo en peligro la seguridad nacional, poniendo en riesgo la integridad de nuestras elecciones”.
En la reconstrucción de la llamada entre Trump y su colega de Ucrania, el estadounidense le pide “un favor” al ucraniano de abrir una investigación contra el ex vicepresidente Joe Biden, el candidato demócrata a la presidencia que actualmente luce como su más seguro rival en las elecciones de 2020.
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Ex funcionarios apoyan apertura del juicio político
Más de 300 antiguos funcionarios de seguridad consideran que las revelaciones del informante anónimo sobre la llamada entre el presidente Donald Trump y su homólogo ucraniano, Volodymyr Zelensky, son “de profunda preocupación para la seguridad nacional” y apoyan que se inicien procedimientos en el Congreso para determinar si se debe abrir un juicio político.
A través de una dura carta los ex funcionarios refieren que “como profesionales de la seguridad nacional, a muchos de nosotros nos preocupan desde hace tiempo las acciones del presidente Trump y sus implicaciones para nuestra seguridad”, dice la misiva promovida por la National Security Action, una organización conformada principalmente por funcionarios que trabajaron con el ex presidente Barack Obama.
A juicio de los 300 firmantes, las revelaciones de los últimos días hacen imperativa “la apertura de un procedimiento formal de juicio político”.
“El presidente Trump parece haberse beneficiado de la autoridad y los recursos de la máxima oficina para invitar a la interferencia extranjera en nuestro proceso democrático. Eso constituiría un inadmisible abuso de poder”, además de supeditar “los intereses políticos personales del Presidente a los estadounidenses”.
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