El presidente Joe Biden considera que el país debe mejorar su tasa de vacunación contra la COVID-19. Ese es un paso que no puede dar sin la colaboración de las personas que se niegan a tomar la inmunización. Sin embargo precisó que está “considerando” ordenar la vacuna obligatoria a los dos millones de empleados federales del país.
Las consideraciones las realizó en el momento que los CDC pidieron a las personas vacunadas volver a usa el tapa bocas. La solicitud es para las personas ubicadas en en zonas de alto riesgo en Estados Unidos. Rochelle Walensky prescribió este cambio que subraya la lucha del país para suprimir la contagiosa variante Delta.
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La directora de los CDC ofreció precisiones con los nuevos datos que manejan. La información muestra que las vacunas son efectivas contra la variante Delta. Sin embargo en los inusuales casos en que hay contagio entre personas inmunizadas se registra un mayor riesgo de transmisión.
Por esto, “en áreas donde hay transmisión sustancial y alta. Los CDC recomiendan que las personas completamente vacunadas usen máscaras en lugares públicos cerrados”, dijo.
Mejorar su tasa de vacunación
Los datos más recientes de los CDC fueron reportados por la AFP. La agencia divulgó que gran parte del sur de Estados Unidos experimenta una transmisión alta. Asimismo trascendió que zonas con altas tasas de vacunación del noreste del país exhiben una transmisión comunitaria moderada.
Es así que desde la Casa Blanca se ordena al país mejorar su tasa de vacunación. Asimismo el Ejecutivo demandó a todo su personal volver a llevar mascarillas. Las tasas de transmisión local en Washington se ha elevado.
Según los últimos datos de los CDC el contagio avanza. El 63% de los más de 3.200 condados del país están experimentando una transmisión considerable o alta.
Se considera transmisión considerable a entre 50 y 100 casos diarios por cada 100.000 habitantes durante un promedio de siete días, mientras que la transmisión alta implica más de 100 casos por cada 100.000 personas sobre el mismo promedio.
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El Presidente dijo que anunciará el jueves los nuevos pasos que dará su gobierno. Están relacionados con superar el estancamiento del proceso de vacunación en Estados Unidos. En un discurso separado ante la comunidad de la Inteligencia estadounidense ofreció su parecer. Cuando a Biden se le preguntó si ordenaría la vacunación obligatoria de los empleados federales fue cauteloso. Respondió: “eso está en consideración en este momento”.
Lo que sí está claro para el Ejecutivo es que debe mejorar su tasa de vacunación. Este lunes, el Departamento de Asuntos de Veteranos (VA) ofreció un anuncio. Dijo que sus más de 115.000 trabajadores de la Salud tendrán que vacunarse contra el COVID-19, Se convertirá en la primera agencia federal en dar una orden semejante.
Walensky explicó que la medida es necesaria. Aparejada al aumento de los contagios causados por la variante Delta en todo el país. Su virulencia se expresa en los estados donde la tasa de vacunación permanece baja.
Aunque las vacunas son eficaces contra la variante Delta, los nuevos datos de los CDC obligan a revocar medidas. Indican que, en raras ocasiones, algunas personas vacunadas pueden infectarse. En estos casos, su carga viral es similar a la de una persona no vacunada.
Para detener la propagación de la variante Delta, los CDC recomendarán que las escuelas adopten la mascarilla universal. Incluye a maestros, personal, estudiantes y visitantes. El uso es independientemente del estado de vacunación, agregó Walensky.
Una tasa de 49% en la nación
Los CDC ya han reconocido que solo 49% de la población estadounidense está completamente vacunada. Aunque la tasa está muy sesgada entre las regiones liberales y conservadoras del país.
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Eric Cioe-Pena, director de Salud Global de Northwell Health en Nueva York, dijo a la AFP que la medida de los CDC “es una solución a un problema que existe porque tenemos altos niveles de personas que no están vacunadas”.