“Un presupuesto extremadamente ordinario para una época extraordinaria”. Así define María Quiñones Sánchez el diseño de inversión que para Filadelfia fue presentado por el alcalde Jim Kenney. La consejera cree que la gestión debe reimaginar su visión de los desembolsos. Ella estima que las partidas de ayuda federal están “infrautilizadas”. Desde su perspectiva Kenney no tiene imaginación para ayudar a la metrópolis.
Desde el seno de su despacho remitió a la prensa un comunicado. En él precisó que va a “votar ‘no’ a todas las medidas de reducción de impuestos de este presupuesto”. La propuesta de $5 mil millones del alcalde Jim Kenney se queda profundamente corta. No es “lo que nuestra ciudad requiere en un momento de necesidad sin precedentes”.
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El instrumento de gasto de gestión fue presentado por el Ejecutivo hace dos meses atrás. “El Ayuntamiento ha trabajado para mejorar el presupuesto del alcalde”. Ha formulado propuestas orientadas a la equidad para los barrios más allá de Center City. Sin embargo “este presupuesto sigue siendo indigno de este momento de la historia de nuestra ciudad”.
El boceto de María Quiñones
La consejera María Quiñones no se presenta frente a los medios con las manos vacías. Ejerce su disenso con un plan para el que está buscando apoyos. “Aquí hay tres formas específicas en las que podemos desbaratar este presupuesto ordinario para dar cabida a algo extraordinario”, dijo.
Los pilares de inversión deben asegurar dinero para “una eficiente lucha contra la violencia con armas de fuego”. Segundo, “inversiones restauradoras a Kensington a la hora de abordar la epidemia de opioides”. Tercero, “reconocer que la vivienda asequible y accesible es un derecho humano”.
“Un presupuesto moral extraordinario debe ir más allá de estas tres propuestas. Debemos desbaratar los recortes de impuestos propuestos por el alcalde. Reimaginar esos ahorros fiscales dirigiendo $30 millones a los negocios de los barrios y 20 millones a las organizaciones artísticas y culturales”, y continuar invirtiendo en nuestro Plan de Acción contra la Pobreza”.
“Apoyo una revisión completa de nuestra estructura de impuestos y regulaciones”. Se requiere un clima de negocios más equitativo tras revisa las presentaciones de negocios del año fiscal 2020. La equidad de impuestos es la forma en que el Presidente Biden propone que creemos una mejor estructura nacional. También debe guiar nuestra estructura local. Tenemos que ser específicos en nuestros incentivos y nuestras medidas de alivio. Tenemos que fijarnos en modelos como el de Atlanta y crear el foro para desarrollar una visión común para Filadelfia 2030”.
En el aquí y el ahora
María Quiñones expresó que “en cuanto a hoy, me uno a mis muchos vecinos. Los que dicen que estamos hartos de estar hartos. Durante más de una década en el Ayuntamiento, he planteado mi preocupación. Precisa cómo el gobierno local “no está proporcionando una seguridad pública adecuada, una vivienda asequible y un camino para salir de la pobreza”.
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“Durante los últimos 15 meses de la pandemia, hemos observado cómo estos problemas se intensifican. Ya que nuestras comunidades desatendidas ponen en riesgo la salud, la vivienda y la estabilidad familiar. Los habitantes de Filadelfia se merecen nada menos que un presupuesto moral a la altura de este momento. Hoy nos hemos acercado, pero aún no estamos ahí”.