El mandatario Nicolás Maduro, declaró una “emergencia energética” en la estatal Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA) tras sanciones de Estados Unidos a una filial de la petrolera rusa Rosneft por comercializar crudo venezolano.
“Declaro la emergencia energética de la industria de hidrocarburos a fines de adoptar las medidas urgentes y necesarias” para protegerla de una “agresión imperialista”, dijo Maduro desde la sede de PDVSA en Caracas.
El mandatario anunció la creación de una comisión de “carácter plenipotenciario” para la “defensa” y “reestructuración” de la industria petrolera; casi el único sostén de la economía venezolana.
Esa comisión encabezada por el vicepresidente del área económica, Tareck El Aissami, incluido en la lista de los 10 más buscados por narcotráfico internacional de Estados Unidos, tendrá poderes irrebatibles para reestructurar la industria nacional. También la integrarán el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino; jefe de las Fuerzas Armadas consideradas el principal sostén del presidente.
“Estoy poniendo todo el poder del Estado, del Gobierno y de la nación para entrarle a PDVSA con todo”, aseguró el gobernante, sin anunciar de momento las medidas concretas que tomará la comisión.
Te puede interesar:EEUU impone sanciones a filial rusa de Rosneft por apoyo a Gobierno de Maduro
Los decretos se aprobaron un día después de que Estados Unidos sancionara a una empresa subsidiaria de la petrolera estatal rusa Rosneft, acusándola de burlar las sanciones contra Venezuela que impiden exportar su petróleo.
Washington ha emitido una batería de sanciones contra Maduro para forzarlo a abandonar el poder, respaldando por su parte al líder opositor Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional y reconocido como presidente interino de Venezuela por más de 50 países.
Guaidó “pidió estas sanciones contra ustedes, porque las sanciones que tomó el gobierno de Estados Unidos ayer contra PDVSA es (…) para quebrar a PDVSA”, dijo Maduro.
En esta nueva etapa, el líder chavista espera alcanzar la “meta modesta” de elevar la producción a 2 millones de barriles diarios, cuando la producción de crudo venezolano está por debajo del millón.
“No acepto más excusas. O producimos o producimos, pero Venezuela tiene que ser una potencia mundial”, dijo.
Sin embargo, no es la primera vez que el Presidente promete una recuperación de la producción del país con las mayores reservas de petróleo, ni la reestructuración de la estatal PDVSA.