Los dolores en la deformada rodilla derecha le hicieron pensar en el retiro y menguaron su temible explosividad. Aunque no es el de antes, Luis Suárez envió un recado al Paris Saint-Germain antes de su duelo en octavos del Mundial de Clubes: un depredador nunca deja de ser depredador.
El Pistolero, de 38 años, recordó sus mejores momentos, los de un 9 tan letal como combativo y asociativo, en el partido contra el Palmeiras de Brasil (2-2) que cerró el Grupo A el lunes en el Hard Rock Stadium y clasificó al Inter Miami de Lionel Messi a la ronda de los 16 mejores.
El equipo rosa estadounidense dejó escapar una ventaja de dos goles, que le hubiera evitado chocar con el coloso francés, pero a cambio obtuvo la mejor versión reciente de uno de los grandes centrodelanteros del siglo XXI: un pase clave para el 1-0 del argentino Tadeo Allende y luego un zurdazo feroz para anotar el 2-0.
Y lo consiguió justo antes de afrontar uno de los partidos más importantes de su corta historia, que lo citará con el campeón de Europa este domingo 29 de junio en el Mercedes-Benz Stadium de Atlanta.
“Muchas veces se le ha cuestionado y sigo diciendo lo mismo, más allá de que hoy hizo el gol que hizo, es un chico que trabaja muchísimo para el equipo”, dijo el técnico de Las Garzas, Javier Mascherano, tras la paridad con el Verdão, en la que el charrúa fue considerado el mejor jugador del partido.
Desafiar el dolor
El Inter Miami y Suárez llegaron al Mundial con más sombras que luces, tras un primer semestre lejos de los primeros puestos de la liga norteamericana (MLS) y con el atacante cuestionado por su desempeño, pese a tener números muy dignos (ocho goles y nueve asistencias en 21 partidos).
“El jugador de fútbol tiene que estar preparado para convivir con la crítica del día a día, convivir con los elogios también. Siempre hay que mantener la línea del ADN competitivo que lleva uno y después intentar que los compañeros se contagien”, explicó.
La buena presentación del uruguayo contra Palmeiras, uno de los actores protagónicos de Suramérica, dejó a un lado los problemas de rodilla que han lastrado su carrera en los últimos años y que inclusive le hicieron pensar en colgar los botines.
Antes de llegar al fútbol de Estados Unidos, a principios de 2024, Suárez hizo público el dolor punzante que sufre “cada mañana” en la rodilla derecha y que le hizo abandonar antes de tiempo el Gremio de Porto Alegre, donde tenía un calendario extenuante.
En el sur de Brasil, su arribó para la temporada 2023 y sus actuaciones destacadas provocaron una “Suarezmanía”, acompañada por un buen desempeño del Tricolor gaucho, que fue subcampeón del Brasileirao en su regreso a la primera división.
Pero su paso por la tierra del “jogo bonito” tuvo un final triste debido a la lesión “crónica”, que le provocaba dolores imposibles de disimular y, según reveló entonces, lo obligaba a tomar pastillas e inyectarse para mantener a raya la aflicción.
La prueba definitiva
“Hay veces que físicamente puede ser más complicado”, dijo el exinternacional celeste en referencia a los achaques de la edad, tanto para él como para los otros veteranos del Inter Miami: Lionel Messi, Sergio Busquets y Jordi Alba.
“Pero a veces la cabeza, la inteligencia de la trayectoria que tenemos, va más rápido que algunos, y eso lo tenemos que tratar de implementar dentro de la cancha”, apuntó.
La experiencia de Los Cuatro Fantásticos, como se le llama en Estados Unidos al cuarteto de exjugadores del FC Barcelona, será clave para intentar frenar, contra todo pronóstico, al poderoso PSG de Luis Enrique.
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El técnico español del rey de Europa los dirigió en el cuadro culé entre 2014 y 2017, una época en la que los catalanes conquistaron nueve títulos, incluidos la Liga de Campeones y el Mundial de Clubes -en el formato antiguo- en 2015.
“Junto al Maestro Tabárez, de la selección, fueron los entrenadores más importantes que tuve en mi carrera”, destacó Suárez. “Sabemos la dificultad que tiene jugar contra el último campeón de la Champions, sabemos que va a ser difícil, muy complicado, pero tenemos nuestras armas para competir”.
Por: AFP
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