A partir del 13 de diciembre de 2019 la legisladora musulmana, representante demócrata por el estado de Pensilvania, Movita Johnson-Harrell, renunciará a su cargo con miras a defenderse de las acusaciones que la vinculan con malversación de dinero de u organización benéfica.
Movita Johnson-Harrell, fue acusada el miércoles 4 de diciembre de ocho presuntos delitos relacionados con el escándalo, incluyendo robo, perjurio y manipulación de registros.
De acuerdo a los hechos expuestos por la vindicta pública, Johnson-Harrell habría estado “podando” dinero de su organización sin fines de lucro – Motivations Education & Consultation Associates – durante años para financiar una variedad de gastos personales, incluyendo abrigos de piel, vacaciones y su campaña.
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“Estoy entristecida y consternada por la naturaleza de las acusaciones que se han presentado contra mí hoy”, dijo Johnson-Harrell en una declaración.
“Discrepo enérgicamente de muchas de estas acusaciones, que por lo general se refieren a antes de asumir el cargo y tengo la intención de aceptar la responsabilidad de cualquier acción que fuera inapropiada”, agregó.
El fiscal general de Pensilvania, el demócrata Josh Shapiro, declaró la semana pasada: “He dicho una y otra vez como fiscal general que nadie está por encima de la ley, sin importar su posición de poder. Y hoy no es diferente.”
El supuesto esquema de Johnson-Harrell ocurrió entre 2015 y 2019, según los cargos. Se le acusa de haber gastado aproximadamente $15,000 en fondos robados en ropa y $16,000 en varias vacaciones diferentes.
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Johnson-Harrell fue elegida para la Cámara de Representantes de Pensilvania para el distrito 190 el 12 de marzo de 2019 durante una elección especial celebrada después de que Vanessa Lowery Brown renunció debido a su condena por cargos de corrupción y soborno. Ella asumió el cargo el 25 de marzo de 2019.