La colombiana Caterine Ibargüen sigue haciendo historia. Ahora ha sido proclamada como la atleta mundial del año en la Gala de la IAAF en Mónaco.
Ibargüen se convirtió en la segunda latinoamericana que gana la máxima distinción de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), 29 años después que la cubana Ana Fidelia Quirot.
La antioqueña coronó un año impecable. Ganó las competencias de longitud y salto triple en los últimos Juegos Centroamericanos y del Caribe, en Barranquilla, y realizó la proeza de conquistar estos dos títulos en la Liga de Diamante en dos ciudades diferentes en el espacio de 24 horas.
“Mi corazón se ha llenado de alegría. Se lo dedico a toda mi Colombia”, expresó Ibargüen tras recibir el premio que compartió con el keniano Eliud Kipchoge, recordman de maratón.
“Es un premio que tiene un sabor muy dulce. La perseverancia, la disciplina y el amor por esto valen la pena, nunca hay que darse por vencido, sino seguir luchando”, expresó la atleta de 34 años de edad había optado al galardón en cuatro ocasiones (2013, 2014, 2015 y 2016).
Ibargüen estimó terminar su carrera deportiva después de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, pero aseguró que el galardón la llena de esperanza para seguir dando conquistas deportivas para Colombia.
La atleta cafetera colecciona victorias importantes como la medalla de oro en salto triple en los olímpicos de Río 2016, y plata en la misma modalidad en Londres 2012. Ganó la liga de Diamante de la especialidad de triple en 2013, 2014 y 2015, los títulos mundiales de Moscú 2013 y Pekín 2015, y alcanzó su actual récord personal (15,31) en 2014 en Mónaco.