Después de un retraso de casi un mes que generó inquietud en sistemas educativos de todo el país, la administración del presidente Donald J. Trump finalmente liberó más de 6 mil millones de dólares en fondos federales para la educación pública.
Para New Jersey, esta decisión es crucial. El estado, que se enorgullece de tener uno de los mejores sistemas escolares del país, depende de más de 140 millones de dólares de estos fondos para sostener programas esenciales. La financiación es vital para iniciativas que van desde programas de verano y actividades extraescolares hasta servicios de alfabetización, tutorías y apoyo psicológico, así como para la capacitación de maestros.
La demora en la entrega de estos recursos, un hecho que se desvió de las prácticas administrativas habituales, encendió las alarmas en el ámbito educativo del estado. La imprevisibilidad en la financiación complica la planificación para los distritos escolares, que dependen de un flujo constante de fondos para asegurar que los estudiantes reciban los servicios que necesitan para el próximo año escolar.
Aun cuando la liberación de los fondos ha sido recibida con alivio, funcionarios de New Jersey, incluyendo al Fiscal General Platkin y a miembros de la delegación del Congreso, han expresado intranquilidad.
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Estos líderes habían presionado a la administración para que liberara los fondos rápidamente, subrayando el compromiso de New Jersey con sus comunidades escolares y la necesidad de estabilidad financiera para el futuro educativo de sus jóvenes.
“Si bien agradecemos que la Administración Trump haya tomado la decisión correcta de liberar estos fondos para la educación, la demora insostenible en su asignación y la desviación de las prácticas anteriores son motivo de gran preocupación”, aseguraron el gobernador Phil Murphy y el Comisionado del Departamento de Educación, Kevin Dehmer, en una declaración conjunta.
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