La segunda y tercera votaciones del cónclave realizadas este jueves 8 de mayo para elegir al sucesor del Papa Francisco como Sumo Pontífice de la iglesia católica culminaron con una fumata negra. Esto significa que no se logró la mayoría de dos tercios entre los 133 cardenales para elegir al sustituto de Jorge Mario Bergoglio.
Según la normativa vaticana para ser elegido Papa son necesarios dos tercios de los votos de los cardenales electores, que en esta ocasión suman 133, así que el elegido necesita como mínimo 89 votos.
Un espeso humo negro surgió de la chimenea instalada en el tejado de la Capilla Sixtina, indicativo de que los purpurados electores enclaustrados en su interior no lograron su misión de escoger a un nuevo Papa.
Miles de personas reunidas en la plaza de San Pedro del Vaticano recibieron con decepción la fumata negra. Los cardenales deben votar de nuevo en una cuarta y quinta votación en horas de la tarde de este jueves 8 de mayo en un nuevo intento de elegir al sucesor de Francisco.
Los 133 cardenales reunidos en cónclave para elegir al nuevo Papa se retiraron a almorzar a la residencia de Santa Marta tras los dos escrutinios de la mañana y a las 4:30 de la tarde (hora local) volverán a la Capilla Sixtina para las otras dos votaciones del día.
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De acuerdo con estimaciones de la Jefatura de Policía de Roma, 10.000 personas se congregaron este jueves 8 de mayo en la plaza de San Pedro del Vaticano y sus alrededores para ver la segunda fumata del cónclave, que salió negra. Se espera que muchas más personas se den cita en el lugar para la fumata de la tarde.