La diferencia entre los candidatos por un escaño al Senado de EE.UU. en representación de Florida, actualmente en manos del demócrata Bill Nelson, que busca la reelección, se reduce a menos de 22.000 votantes, el 0,26 %, según datos oficiales mientras avanza el proceso para el recuento obligatorio.
Según la ley estatal de Florida, un recuento es obligatorio si el margen del candidato ganador, en este caso el gobernador de Florida, el republicano Rick Scott, es inferior a 0,5 puntos porcentuales.
“Todavía no se ha contabilizado un número significativo de boletas y, debido al tamaño de Florida, creemos que los resultados de las elecciones son desconocidos y requieren un recuento”, aseguró hoy Marc Elias, abogado de la campaña de Nelson.
Entre tanto, las cifras actualizadas de votación, de más de 8,1 millones de votantes, una cifra récord en Florida en unas elecciones de mitad de mandato presidencial, evidencian también una reducción de la ventaja en la competencia por la Gobernación del estado.
En esta competencia ya se declaró como ganador el republicano Ron DeSantis, quien fue avalado por el presidente Donald Trump, frente al demócrata Andrew Gillum.
El demócrata, primer candidato afroamericano a la Gobernación en la historia del estado, concedió la victoria a su rival la misma noche de las elecciones, el martes pasado.
Ahora, la ventaja es de solo el 0,52 %, unos 43.000 votos más para DeSantis, y solo a 0,2 puntos porcentuales para el 0,50 % de diferencia que justificaría un recuento oficial como el que avanza en el caso del Senado.
Redacción Agencias.