El Congreso de El Salvador, de mayoría oficialista, aprobó este 15 de marzo una nueva ampliación de un régimen de excepción solicitado por el Gobierno del presidente Nayib Bukele quien ha declarado una “guerra contra las pandillas”. La medida se mantiene en el país centroamericano desde el 27 de marzo de 2022.
Este régimen de excepción que suspende algunas garantías constitucionales, fue aprobado hace casi un año luego de un aumento de asesinatos que se atribuyen a las pandillas y que se cobró la vida de más de 80 personas en tres días.
La solicitud de ampliación fue presentada por el ministro de Seguridad Gustavo Villatoro, y aprobada por los legisladores del oficialista partido Nuevas Ideas (NI) y sus aliados, con 67 votos a favor de los 84 diputados.
Se trata de la prórroga número 12 que entrará vigencia el 18 de marzo hasta el 16 de abril con el fin de enfrentar a la estructura de pandillas que viven y se nutren de las extorsiones, el sicariato y la venta de drogas.
La extensión de la medida, a la que el Gobierno del presidente Nayib Bukele denomina “guerra contra las pandillas”, suspende las garantías constitucionales del derecho a la defensa de las personas detenidas, la inviolabilidad de las telecomunicaciones y el plazo máximo de detención provisional de 72 horas.
Este día, en un nuevo operativo, trasladamos al segundo grupo de 2,000 pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT).
Con esto, ya son 4,000 pandilleros los que habitan la cárcel más criticada del mundo. pic.twitter.com/A2oTUIYubW
— Nayib Bukele (@nayibbukele) March 15, 2023
Junto antes de la aprobación de la ampliación de régimen de excepción, el presidente Bukele anunció a través de Twitter el traslado de dos mil pandilleros a una nueva prisión de máxima seguridad, con lo que suman cuatro mil los reos en el recinto que es catalogado por el mandatario salvadoreño como la más grande de América.
“Este día, en un nuevo operativo, trasladamos al segundo grupo de 2.000 pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot)”, publicó el Jede de Estado en Twitter.
Según las cifras oficiales, son unos 66.000 detenidos, que son acusados por el Estado de ser pandilleros, y habrían sido puestos en libertad condicional unos 3.300.
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Las autoridades atribuyen a esta “guerra contra las pandillas” y al Plan Control Territorial el desplome de las cifras de homicidios que según las cuentas oficiales fueron 496 en 2022, un 57 % menos que en 2021.
Según un sondeo del Instituto Universitario de Opinión Pública (Iudop) de la Universidad Centroamericana (UCA) divulgado en octubre de 2022, el 75,9 % de la población salvadoreña aprueba la medida.