A partir del 26 de diciembre, el Departmentof Homeland Security (DHS) pondrá en marcha una nueva normativa que exigirá la recopilación de datos biométricos, incluyendo fotografías faciales, de todos los no ciudadanos que ingresen o salgan del país.
Esta medida se aplicará en aeropuertos, puertos marítimos y cruces fronterizos terrestres, y forma parte de un esfuerzo por modernizar el sistema de control migratorio y mejorar la seguridad nacional.
¿Qué implica esta nueva medida?
La regla final, publicada en el Federal Register el pasado 27 de octubre, autoriza a la U.S. Customs and Border Protection (CBP) a tomar fotografías y recopilar otros datos biométricos de los extranjeros al momento de su entrada y salida del país.
“El DHS podrá exigir que todos los extranjeros sean fotografiados al entrar o salir de Estados Unidos, y podrá exigir que los extranjeros no exentos proporcionen otros datos biométricos. La norma final también modifica las regulaciones para eliminar las referencias a los programas piloto y la limitación portuaria, permitiendo así la toma de datos biométricos a los extranjeros que salgan de aeropuertos, puertos terrestres, puertos marítimos o cualquier otro punto de salida autorizado”, precisa la regla final.
Esta expansión elimina las limitaciones anteriores que restringían la recopilación de datos biométricos a ciertos puntos de entrada y salida, permitiendo su implementación en todos los puertos de entrada autorizados.
El objetivo principal de esta medida es fortalecer la seguridad nacional, prevenir el uso fraudulento de documentos de viaje y mejorar el control de la inmigración, especialmente en lo que respecta a las personas que permanecen en el país más allá de su período autorizado.
¿Quiénes estarán sujetos a esta normativa?
La nueva regla se aplicará a todos los no ciudadanos que ingresen o salgan de EE. UU., incluyendo titulares de visas, residentes permanentes y visitantes. Sin embargo, se han establecido ciertas excepciones:
- Niños menores de 14 años.
- Adultos mayores de 79 años.
- Diplomáticos y representantes de organizaciones internacionales.
- Otros grupos que puedan ser exentos según lo determine el DHS.
Es importante destacar que los ciudadanos estadounidenses no estarán obligados a proporcionar sus datos biométricos, aunque pueden optar por hacerlo de manera voluntaria.
¿Cómo funcionará el sistema de reconocimiento facial?
El sistema de reconocimiento facial utilizará fotografías previamente proporcionadas por los viajeros, como las de pasaportes, visas o interacciones anteriores con la CBP. Estas imágenes se almacenarán en una base de datos centralizada y se compararán con las fotografías tomadas al momento de la entrada o salida del país.
Si se produce una coincidencia, se verificará la identidad del viajero. En algunos casos, también se podrán tomar huellas digitales para confirmar la identidad.
Lee también:Jefe de la ONU pide combatir desinformación relacionada con el cambio climático
La U.S. Customs and Border Protection estima que este sistema de reconocimiento facial se implementará en todos los aeropuertos y puertos marítimos comerciales en un período de tres a cinco años.
La implementación de este sistema de reconocimiento facial representa un paso significativo hacia la modernización del control migratorio en Estados Unidos. Sin embargo, también plantea preocupaciones sobre la privacidad y la protección de los datos personales.

































Noticias Newswire







