La Casa Blanca no descarta otro cierre parcial de la Administración en EE.UU. como consecuencia de la falta de un acuerdo en que republicanos y demócratas se sientan cómodos en torno a las aspiraciones que el Jefe de la Casa Blanca desea para implementar su política de seguridad fronteriza.
Este lunes los negociadores clave que buscan evitar un nuevo cierre del gobierno están listos para reunirse después de que las conversaciones se descarrilaran durante el fin de semana, sin embargo las posibilidades de que fracase son 50-50.
Un asesor del la Cámara Alta confirmó que los senadores republicanos Richard Shelby y Kay Granger, junto a los demócratas Patrick Leahy y Nita Lowey serían los encargados para intentar romper el estancamiento.
El jefe de gabinete interino de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, no descartó otro cierre parcial de la Administración en EE.UU. a partir del próximo 15 de febrero, fecha límite para que un comité bipartidista del Congreso logre un acuerdo sobre los fondos del Departamento de Seguridad Nacional.
“Un cierre de Administración está técnicamente aún sobre la mesa”, advirtió en declaraciones al programa “Fox News Sunday” Mulvaney, que recordó que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no firmará un pacto que encuentre “inaceptable”.
“Digamos que el ala izquierda del partido demócrata prevalece en esta negociación y proponen un proyecto de ley con, digamos, cero dinero para el muro o 800 millones, un número absurdamente bajo. ¿Cómo va Trump a firmar eso? No puede firmarlo”, agregó.
Los demócratas reconocieron el domingo pasado que habían propuesto un límite en el número de camas de detención de ICE, argumentando que obligaría a la administración de Trump a enfocarse en “criminales serios” y estaba en línea con los números de la administración de Obama.
“El administrador de Trump ha estado destrozando comunidades con sus políticas de inmigración crueles. Un límite en las camas de detención de ICE forzará al Administrador de Trump a priorizar la deportación de criminales y personas que representan amenazas reales a la seguridad, no a inmigrantes respetuosos de la ley que contribuyen a nuestro país”, dijo la representante Lucille Roybal-Allard en un tweet.