El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, instó a sus aliados americanos a “congelar los activos” de la petrolera estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) y a entregárselos al Gobierno del presidente interino, Juan Guaidó.
Pence hizo la petición en el llamado Grupo de Lima reunido este lunes en Bogotá, Colombia, para buscar soluciones al conflicto venezolano. En esta reunión también participa Juan Guaidó, reconocido por medio centenar de países como presidente interino de Venezuela, además de una alianza de 13 Estados latinoamericanos y Canadá.
Estados Unidos también anunció este lunes que impuso sanciones a los gobernadores de cuatro estados venezolanos próximos a Maduro por bloquear la entrada de la ayuda humanitaria.
Los sancionados, que según Estados Unidos están implicados “en el bloqueo de la entrega de ayuda humanitaria y la endémica corrupción”, son los gobernadores de los estados venezolanos de Apure, Ramón Carrizalez, y Zulia, Omar Prieto, ambos fronterizos con Colombia, y los de los costeros de Carabobo, Rafael Lacava, y Vargas, Jorge Luis García Carneiro, que cuentan con importantes puertos marítimos.
Tras la tensión del sábado, día señalado por Guaidó para el ingreso de la ayuda humanitaria en Venezuela, la jornada del domingo transcurrió un poco más tranquila en las fronteras venezolanas.
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La represión de los uniformados y de grupos parapoliciales próximos al chavismo, que utilizaron armas de fuego para impedir el ingreso de ayuda humanitaria a Venezuela, dejó una estela de muertos y heridos, con mayor incidencia en la población de Santa Elena de Uairén, limítrofe con Brasil, donde el sábado se produjeron al menos cuatro asesinatos a manos de los colectivos chavistas.
El apoyo de Duque
El presidente colombiano Iván Duque, durante su intervención en la cumbre, dejó claras las propuestas que tiene su gobierno alrededor de la situación que se vive en Venezuela, más allá de fortalecer el “cerco diplomático”.
Manifestó que es necesario tomar acciones y decisiones sancionatorias contra el dictador, en referencia a Nicolás Maduro, y se le dé “mayor legitimidad y poderío a la Asamblea Nacional y al Presidente encargado”, Juan Guaidó.
“Que los activos que tiene Venezuela en nuestros países, que son gubernamentales, sean ya declarados bajo el control absoluto de la Asamblea Nacional y del presidente Guaidó para que establezcan los mecanismos de administración”, dijo Duque.
El Jefe de Estado también pidió hacer un llamado a la Organización de Estados Americanos para que se adopten las resoluciones, sanciones y denuncias pertinentes por lo ocurrido este fin de semana. El gobierno de Maduro impidió el ingreso de camiones con ayuda humanitaria y se produjeron hechos de violencia en la frontera con saldo de heridos y varios camiones incendiados.
En su intervención, Duque también expuso una petición al Banco Interamericano de Desarrollo. Les solicitó que contribuya a articular el plan de recuperación de Venezuela una vez termine la “dictadura”.
Dijo que la situación que vive Venezuela no se puede ver como un dilema entre guerra y paz. Él considera que “el verdadero dilema es la continuación de la tiranía o el triunfo contundente de la democracia”.
El mandatario colombiano insistió en que el aislamiento “del dictador” es el primer paso para que se reinicie la institucionalidad y se abra el camino a la democracia y calificó el trabajo realizado como “el cerco diplomático más efectivo que se conozca en el hemisferio” y por eso este encuentro del Grupo de Lima debe servir para que el cerco sea más poderoso y más efectivo.