Autoridades estadounidenses en esta semana han ofrecido una variedad de opciones para que el presidente Maduro deje el poder con un mínimo de traumas para los venezolanos: Han asomado que puede “irse a vacacionar a una playa en el Caribe”, que no habrá una “inminente” intervención militar y han dicho a las empresas petroleras que tienen entre el 28 de marzo y el 29 de abril para poner en orden sus negocios.
Sin embargo, no hay que perder de vista la opinión del Consejero de Seguridad Nacional, quien expresó confianza en que las protestas convocadas para este sábado en Venezuela por el jefe del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, “convenzan a los militares y a otros en Venezuela de que la abrumadora mayoría del pueblo del país quiere que se vaya el régimen de Maduro”.
Uno de los personajes aludidos por los medios es John Bolton, el asesor de seguridad nacional del presidente estadounidense, Donald Trump, quien descartó este viernes que Estados Unidos, Brasil o Colombia estén planeando una intervención militar inminente en Venezuela, al asegurar que desea una “transición pacífica”.
Por otra parte el Departamento del Tesoro, en comunicado público, advirtió que las compañías no estadounidenses que adquieren petróleo a Venezuela a través del sistema financiero de EE.UU. o agentes de este país tienen hasta el 28 de abril para poner fin a sus compras.
Además la Secretaría de Steven Mnuchin indicó que los ciudadanos de EE.UU. que se hallen trabajando para empresas no estadounidenses fuera del país y Venezuela tienen hasta el 29 de marzo para llevar “a cabo ciertas transacciones de mantenimiento o repliegue”.
La jornada de hoy que manejó el tema de Venezuela dentro de los Estados Unidos estuvo muy movida. Temprano el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, afirmó, tras una reunión con líderes de la comunidad venezolana en el sur de Florida, que la “lucha” que sacude Venezuela es “entre la democracia y la dictadura” y este es el momento de que el país “recupere la libertad”.
“Creo que viene el día para que Venezuela sea libre y recupere su libertad”, aseveró Pence en la iglesia Jesús Worship Center de Doral, ciudad aledaña a Miami, con una gran población venezolana, donde se reunió con líderes comunitarios y expresos políticos del país sudamericano.
En ese mismo escenario estuvo el venezolano Carlos Vecchio, representante diplomático de Juan Guaidó en EE.UU. quien subrayó que “no hay espacio para la neutralidad” cuando el dilema es “dictadura” o “democracia” e instó a todos los países a apoyar “el cambio”.
La retórica apuntó directamente a Uruguay y México, dos países que no han tomado partido ante la situación de Venezuela, donde Nicolás Maduro se mantiene en la Presidencia y el opositor Guaidó se ha juramentado como presidente interino.
Pence en pocas palabras
El vicepresidente Mike Pence desde Florida expresó al comienzo de su exposición durante un encuentro con la comunidad venezolana residente en ese estado del sur, que estaban orgullosos de poder decir que Estados Unidos ha sido la “primera nación en la tierra en reconocer a Juan Guaidó” como presidente encargado de Venezuela, como ha hecho ya gran parte de la comunidad internacional.
Tras asegurar que la “dictadura de Maduro está destrozando Venezuela”, dejó claro que ya “no es tiempo de diálogo” sino “tiempo de acción”, y le instó a que abandone el poder.
John Bolton y las ofertas
El asesor de seguridad nacional del presidente estadounidense, Donald Trump, reafirmó que no desea que se cristalice una intervención militar en Venezuela y así descartó que Estados Unidos, Brasil o Colombia urdan un plan en esa dirección.
Sin embargo volvió a recordar que desde la Casa Blanca se ha dicho con respecto al caso Venezuela que “todas las opciones están sobre la mesa” y que “nuestro objetivo es una transición pacífica del poder”.
John Bolton ofreció estas declaraciones en el programa radial de Hugh Hewitt, espacio en el que precisó que Estados Unidos aplica progresividad en la presión que ejerce sobre Nicolás Maduro, por lo que “hemos estado imponiendo sanciones económicas, aumentando la presión política en todo el mundo”.
Bolton generó revuelo al comparecer ante la prensa el pasado lunes sosteniendo un bloc de notas en el que podía leerse, tal y como captaron los fotógrafos, la frase “5 mil tropas a Colombia”.
La anotación en el bolc fue una pregunta ineludible, a la que el asesor de Trump dijo que dar más detalles sobre las opciones militares de EE.UU. “sería imprudente, como diría George H. W. Bush”.
También afirmó que Maduro debería retirarse a vivir a una “bonita playa lejos de Venezuela”, y que de lo contrario se arriesga a acabar “en otra zona playera como la de Guantánamo” (Cuba), donde EE.UU. tiene una prisión para sospechosos de terrorismo.
Bolton opinó además que, si Maduro deja el poder, “la infraestructura petrolera” de Venezuela “puede arreglarse bastante rápidamente”, y esa puede ser una “fuente de ingresos” importante para reparar la “devastación económica” que vive el país.