La pesadilla de todas las madres del mundo se hizo realidad para una que en Filadelfia dejó el automóvil encendido con sus dos hijos menores dormidos en el asiento trasero mientras se bajó para retirar de una taquilla una comida para llevar.
Probablemente el rechinar de los neumáticos le anunció junto a un sobresalto en el corazón que sus hijos corrían un grave peligro. La historia original fue divulgada por la Associated Press, que vio como la popular secuencia de ficción se hacía realidad frente a la pantalla del despacho noticioso que generó el reporte.
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Dos niños pequeños salieron ilesos cuando el automóvil en el que estaban fue robado el jueves temprano de un restaurante de comida para llevar de Filadelfia mientras su madre estaba dentro del negocio, dijeron las autoridades.
La gran productora de contenidos de ámbito mundial con sede en Nueva York publicó que dos niños pequeños salieron ilesos cuando el automóvil en el que estaban fue robado la madrugada del jueves de un restaurante de comida para llevar de Filadelfia mientras su madre estaba dentro del negocio.
La madre estaba recogiendo comida y había dejado el vehículo en marcha mientras los niños, uno pequeño y un bebé, dormían en el asiento trasero. Un hombre de 25 años entró en el vehículo alrededor de la 1:30 a.m. y se fue.
La agencia de noticias verifico la historia con las autoridades policiales locales que dieron algunos detalles del incidente. Tras la escalofriante sensación de perder a sus hijos en manos de un ladrón de autos, la madre dio a la policía una descripción del vehículo y fue visto minutos después por un oficial. El hombre que conducía el auto fue capturado después de un breve forcejeo, dijo la policía.
Los dos niños aparentemente durmieron durante todo el incidente y no resultaron heridos. Nadie más estaba en el vehículo cuando ocurrió el robo, dijeron las autoridades.