Una representación legislativa estadounidense con tenor bipartidista que estuvo presente el domingo en la ciudad fronteriza colombiana de Cúcuta, emitió un mensaje en el que denotaron que en el Congreso desde Washington están unidos en la idea de que la ayuda humanitaria ingrese a Venezuela.
Las legisladoras Debbie Wasserman Schultz y Donna Shalala estuvieron en la zona norte del Departamento de Santander en Colombia, limítrofe con Venezuela, en donde dijeron que demócratas y republicanos están unidos para llevar la ayuda humanitaria a los venezolanos.
“Estamos hoy aquí para que el mundo entienda que republicanos y demócratas de los Estados Unidos están unidos en ayudar para asegurarse que la asistencia humanitaria pueda cruzar esos puentes”, dijo la demócrata Wasserman a periodistas.
Una de las imágenes que más impresionó a las parlamentarias las evidenciaron durante un recorrido por el puente internacional Simón Bolívar, donde fueron testigos de cómo miles de personas cruzan a diario por los pasos ilegales conocidos como trochas, buscando abastecerse en Colombia de alimentos, medicinas y productos de higiene.
La visita fue oportuna para que las congresistas conocieran el centro de acopio de la ayuda humanitaria, ubicado en el puente de Tienditas.
El pasado 23 de febrero cerca de 40 toneladas de medicinas y alimentos se perdieron durante el frustrado intento del ingreso de la ayuda humanitaria al país vecino, cuando durante escaramuzas entre fuerzas del gobierno de Maduro fueron incendiados dos camiones que transportaban la carga.
Más de 600 toneladas de ayudas, entre alimentos e insumos médicos, se encuentran acopiadas en Cúcuta a la espera de ser llevadas hacia Venezuela.
La visita a la frontera ocurre en momentos en que el jefe del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, que se proclamó presidente interino de su país en enero pasado y es reconocido como tal por unos 50 países, confirmó este domingo que son 17 los muertos en los hospitales a causa del apagón que ya completa casi 70 horas en la mayoría del país.
Venezuela sufre desde el jueves 7 de marzo un gran apagón en la mayoría de su territorio, incluida Caracas, con retornos cortos e intermitentes de energía.
Debido al apagón también se ha visto afectado el suministro de agua, aunque este recurso también escasea desde hace años en el país, mientras que las comunicaciones son complicadas, pues las operadoras no funcionan en diversas zonas del territorio nacional, incluida Caracas.