Hasta los momentos no se ha identificado a la mujer. Según el video estaba formada en el restaurant para ordenar comida. Fue informada que el establecimiento ya no daría servicio. La asombrosa reacción se volvió tendencia. Sacó del bolso una pistola y con voz controlada dijo a los empleados: “Dame mi comida”. Al parecer “un día de furia” hizo a una dama ordenar comida a mano armada.
El incidente recuerda la secuencia que desarrolla el personaje William Foster de la película de 1993 Falling Down. La misma que en español fue retitulada “Un día de furia”. Con la actuación de Michael Douglas un hombre se ve superado por sus pasiones cuando en un restaurant de comida rápida le niegan servirle un desayuno tres minutos después de finalizar el horario.
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La nota hecha por Stephen Sorace para Fox News no tiene más precisiones que los hechos escuetos. Una cliente de Chipotle amenazó a los empleados dos veces con una pistola por un pedido de comida, según la policía.
Ordenar comida a mano armada
El reporte divulgado este jueves indica que una cliente esperaba en la cola de un Chipotle en Filadelfia. Ocurrió el sábado. Tras descompensarse emocionalmente apuntó con una pistola a una cajera. Le exigió comida después de que los empleados le dijeran que la tienda estaba cerrando, según informaron las autoridades.
Tal vez un desorden de salud mental llevó a la dama a ordenar comida a mano armada. Se le negó la atención después de que el gerente instruyera a los empleados para que cerraran la tienda. Ordenó decir a los clientes que esperaban que hicieran sus pedidos en línea. Esto ocurre debido a la escasez de personal, dijo el Departamento de Policía de Filadelfia.
Sin embargo, una cliente que estaba con un varón desconocido sacó una pistola de su bolso. Exigió hablar con el gerente cuando se le dijo que la tienda estaba cerrando. Solo blandió el arma. No apuntó a nadie. Usó la pistola como una “facilitadora” de su negociación. Enseguida la guardó y esperó con los brazos cruzados por su pedido. Nadie en la cola de pedidos se conmocionó o perturbó y permanecieron en el lugar como si nada ocurriera.
Una tranquila conmoción
Una cajera pulsó inmediatamente el botón de pánico para avisar a la seguridad del centro comercial. La clienta amenazó con que “si alguien no le hace la comida volverá y habrá un problema”, dijo la policía.
La mujer volvió a guardar el arma de fuego en su bolso y otra empleada decidió servirle el pedido para que se marchara, según las autoridades. El Departamento de Policía dijo que ella dio su orden y blandió el arma de fuego de nuevo, exigiendo: “Más vale que alguien me dé mi comida”. Una vez que se completó el pedido, que la mujer tomó la comida y salió del restaurante en dirección desconocida.
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Las autoridades han pedido ayuda a la comunidad. Cualquier persona que tenga información sobre la sospechosa buscada por ordenar comida a mano armada debe informar a la policía.