En el sur de Florida, donde el agua es parte inseparable del paisaje urbano, esta también puede convertirse en escenario de crímenes, rescates y operaciones de seguridad nacional. Para enfrentarse a esos desafíos invisibles bajo la superficie, el Departamento de Policía de Miami-Dade cuenta con un grupo especializado del que pocos residentes han oído hablar. Se trata del Equipo de Recuperación Subacuática (Underwater Recovery Team, URT), una unidad élite que combina investigación criminal, buceo táctico y ciencia forense.
El URT opera dentro de la Patrulla Marina, y su misión va mucho más allá del buceo tradicional. Estos agentes trabajan en entornos donde la visibilidad es mínima, la corriente es impredecible y cada segundo puede marcar la diferencia entre salvar una vida o preservar una prueba vital.
“Cada cuerpo de agua en Miami-Dade puede ser una escena del crimen. Nuestro trabajo consiste en recuperar la verdad desde el fondo”, explican miembros del equipo, que realizan sus misiones en canales, lagos, bahías e incluso en las zonas portuarias de PortMiami.

Tres frentes de acción
El trabajo del URT se organiza en tres áreas principales:
- Búsqueda de evidencia criminal.
Cuando un sospechoso arroja un arma, drogas o dispositivos electrónicos al agua, los buzos del URT son los encargados de localizar y recuperar ese material sin comprometer la cadena de custodia. Operan guiados solo por el tacto y la comunicación por cable, documentando cada hallazgo con técnicas de fotografía y mapeo forense subacuático.
- Seguridad portuaria y antiterrorismo.
En el puerto más activo de Florida, PortMiami, el equipo inspecciona cascos de buques, muelles y pilares en busca de dispositivos explosivos o de contrabando. Su labor es parte del sistema de defensa antiterrorista del país, coordinado con agencias como el FBI, ICE y la Guardia Costera.
- Búsqueda y rescate de personas.
El aspecto más humano de su misión consiste en la recuperación de víctimas en ríos, canales o embalses. Los buzos utilizan sonares de barrido lateral y mapas digitales para reconstruir la escena antes de tocar cualquier cuerpo o evidencia. Son tareas de alta carga emocional, donde precisión y respeto son esenciales.

Entrenamiento extremo y cooperación interagencial
Ingresar al URT requiere entrenamiento técnico avanzado en buceo de seguridad pública, navegación subacuática, documentación forense y rescate en espacios confinados. Además, los agentes deben superar pruebas físicas y psicológicas rigurosas, ya que trabajan en condiciones de oscuridad total, temperaturas variables y corrientes peligrosas.
Su experiencia también los convierte en aliados de agencias federales. A menudo colaboran en investigaciones nacionales de tráfico marítimo, recuperación de evidencia balística o accidentes aéreos sobre cuerpos de agua.
Te puede interesar:Buzos encuentran restos de avión militar siniestrado hace 66 años
Una labor que se replica en todo el país
Equipos como el URT existen en otras ciudades costeras y fluviales de Estados Unidos. El NYPD Dive Team en New York, el Los Angeles Port Police Dive Team y el Seattle Police Harbor Patrol realizan tareas similares, desde recuperar víctimas hasta investigar delitos ambientales. En conjunto, estas unidades representan una red invisible pero vital para la seguridad pública, extendiendo el alcance de la ley a los lugares menos accesibles del territorio.
En un condado donde el agua forma parte del día a día, los buzos del URT recuerdan que ningún crimen puede esconderse para siempre bajo la superficie. Su trabajo silencioso y preciso demuestra que, en Miami-Dade, la justicia también se sumerge.

































Noticias Newswire









