Miembros del Consejo Israelí-Estadounidense marcharon por la Universidad de Pennsylvania para pedir el fin del actual campamento de activistas pro palestinos en el campus.
Los contramanifestantes les exigieron a las autoridades universitarias que pongan fin a la protesta en curso por la guerra en Gaza, alegando que el reclamo del campamento “se ha convertido en un discurso de odio y amenazas”.
El grupo de manifestantes marchó por el campus para entregarle a las autoridades universitarias un petitorio con más de 3.000 firmas de personas que pedían el fin del campamento.
Los manifestantes también les recordaron a las autoridades universitarias que tienen la obligación de brindar seguridad a todos sus estudiantes y profesores de la casa de estudios superiores.
El campamento de la Universidad de Pennsylvania comenzó el pasado jueves 25 de abril, luego de que 200 manifestantes pro palestinos marcharan por el centro de Philadelphia antes de establecerse en Penn, frente al College Hall.
El campamento es uno de los muchos que se han instalado en otras universidades del país con la intención de pedir un alto el fuego en Gaza en medio de la guerra entre Israel y Hamas, así como exigir el a las autoridades universitarias que dejen de invertir en todo apoyo financiero de Israel.
El pasado 26 de abril, el presidente interino de la Universidad de Pennsylvania, J. Larry Jameson, pidió la disolución del campamento, al asegurar que viola las políticas de instalaciones de la universidad.
Jameson destacó que los comentarios y acciones de acoso e intimidación de algunos manifestantes violan las pautas de expresión abierta de la escuela, así como las leyes estatales y federales.
También acusó a algunos de los manifestantes de destrozar una estatua congrafitis antisemitas, y detalló que este acto sería investigado como un crimen de odio.