Según la opinión de Krzysztof Pelc, profesor Asociado y William Dawson Scholar en el Departamento de Ciencias Políticas de McGill. De acuerdo a su perspectiva China debería exigir que los EE.UU. compensen a los trabajadores estadounidenses perjudicados por el comercio.
Su afirmación está basada en un extenso estudio que desvela si China no pide protección para los trabajadores estadounidenses en el marco de su negociación actual para un acuerdo comercial, los trabajadores agraviados presionarán a favor de los aranceles, lo que a su vez perjudica a los exportadores chinos.
Su investigación actual se centra en dos campos. Sin embargo vamos a tomar el pertinente al tema. Es allí que nace en su indagación la pregunta en torno a ¿cómo pueden los gobiernos redistribuir efectivamente los beneficios de la integración internacional entre los grupos nacionales? Para dar respuesta a la interrogante examinará cómo los gobiernos intentan esta compensación, si ha logrado los objetivos buscados y si algunos enfoques funcionan mejor que otros.
En perspectiva el profesor sabe que los EE.UU. ya tienen un programa diseñado para hacer esto, llamado Asistencia de Ajuste Comercial (TAA).
A pesar de ser un compromiso político no amado -a la mayoría de los demócratas les gustaría ampliarlo, mientras que la mayoría de los republicanos lo consideran ineficaz- el TAA ha demostrado ser exitoso en su tarea.
Los trabajadores elegibles reciben capacitación, ingresos subsidiados y asistencia médica y de reubicación. Aquellos trabajadores que se incorporan al TAA terminan ganando $50,000 más en la década siguiente a la pérdida del empleo que aquellos que no lo hacen. Durante ese período, también es menos probable que necesiten otros tipos de asistencia gubernamental, como beneficios médicos.