El presidente Joe Biden se dirigió a los estadounidenses para decirles que los sistemas financieros de la nación estaban seguros, tratando de proyectar la calma después del sorprendente colapso de dos bancos que provocó temores de una agitación más amplia.
“Tus depósitos estarán ahí cuando los necesites”, aseguró el presidente, al tiempo que destacó que trataría de responsabilizar a los involucrados, y presionó por una mejor supervisión y regulación de los bancos más grandes.
“Debemos tener la contabilidad completa de lo que pasó. Los estadounidenses pueden confiar en que el sistema bancario es seguro”.
Biden también dijo que la dirección de los bancos debería ser despedida. “Si el banco es tomado, las personas que dirigen el banco ya no deberían trabajar”, señaló, al referirse a la Federal Deposit Insurance Corp., la agencia responsable de garantizar la estabilidad del sistema bancario.

Todo esto se luego de que los reguladores estadounidenses cerraran el Banco de Silicon Valley después de que experimentara una carrera bancaria tradicional, donde los depositantes se apresuraron a retirar todos sus fondos de una vez.
Esta es la segunda quiebra bancaria más grande en la historia de los Estados Unidos, solo por detrás de la de Washington Mutual en 2008.
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Con más de 110 mil millones de dólares en activos, Signature Bank es la tercera quiebra bancaria más grande en la historia de los Estados Unidos.
Otro banco asediado, First Republic Bank, anunció que había reforzado su salud financiera al obtener acceso a fondos de la Reserva Federal y JPMorgan Chase.
Los acontecimientos dejaron a los mercados nerviosos cuando las operaciones comenzaron esta semana. Los mercados asiáticos y europeos cayeron, pero no drásticamente, así como los futuros de EEUU.