La avena puede ser incluida en la lista de desayunos sencillos y nutritivos. Tiene innumerables beneficios para el organismo, ya que es rica en proteína, fibra, es baja en grasa, contiene zinc, magnesio B1, B2 y E.
La preparación de este alimento es sencilla. Para una ración de 1 persona se pone a calentar una taza de leche y se le agregan 2 cucharadas soperas de avena. Se revuelve hasta que se vaya poniendo cremosa.
Si la persona gusta, se le puede agregar una cucharadita de azúcar o dos de miel para endulzar. Si se quiere una versión ligth, se puede sustituir la leche por agua o por leche de almendras.
La avena también aporta grandes beneficios. Entre ellos ayuda a adelgazar, por ser bajo en calorías y por reducir los antojos. Una taza contiene solo 130 calorías.
Este alimento también proporciona un alto nivel de fibra, proteína y es baja en grasa, más que cualquier otro grano. Además estabiliza el azúcar en la sangre y reduce el riesgo de diabetes tipo 2.
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Por si fuera poco, también elimina el colesterol malo sin afectar el bueno, y es antioxidante y reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular.