Andrej Mahecic, portavoz de Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), frente a la decisión de la Corte Suprema de Justicia que autorizó la aplicación de la “nueva regla” migratoria dictada por el presidente Trump, dijo que “lamentamos el impacto que esta normativa tendrá en los solicitantes de asilo”.
La nueva regla que establece que los solicitantes de asilo que lleguen a suelo estadounidense a través de un tercer país, deberán ser rechazado por las naciones o nación que esté en su ruta en su aspiración de protección, como requisito para ser elegible en un proceso que considerará en suelo estadounidense si la persona es merecedora o no de refugio.
La normativa que se encuentra en vigencia, cursó una jornada en tribunales federales donde consiguió jueces que la bloqueran, sin embargo la alta corte de la Unión, que está por encima de las estatales le dio luz verde a la regla.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados precisa que el énfasis de la “nueva regla” estará en limitar la entrada de migrantes en la frontera sur con México.
Andrej Mahecic recordó que “cualquier persona que huya de la violencia o la persecución debe poder acceder a protección internacional y a los adecuados procedimientos de asilo”.
El requisito impuesto a los necesitados de asilo en la práctica frenará en gran medida la entrada de migrantes de México y Centroamérica en Estados Unidos, dado que muchos de esos países en la región no cuentan con infraestructuras para atender tales peticiones de asilo.
Las autoridades estadounidenses comenzaron a aplicar la normativa un día después de la autorización del alto tribunal, pese a que la medida había sido previamente bloqueada por un juez federal en California, iniciando el litigio que actualmente está en manos del Supremo.
A principios de esta semana la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, recordó que al menos 35 mil solicitantes de asilo fueron bloqueados en zonas fronterizas de México en lo que va de año.
La chilena también aseguró que el endurecimiento de las políticas migratorias en la región no detendrá el desplazamiento de familias que huyen de problemas causados por la inseguridad, la corrupción o las consecuencias del cambio climático, sino que abocará a muchos a emprender rutas más peligrosas.