Con un minuto de aplausos los campos de la Premier League recordaron al futbolista ghanés Christian Atsu, cuyo cuerpo fue recuperado de los escombros de una residencia de la ciudad turca de Hatay, una de las más destruidas por los fuertes terremotos que azotaron a Turquía y Siria el pasado 6 de febrero.
El delantero de 31 años, que militó en el Málaga, en el Oporto, el Chelsea, el Everton y el Newcastle United, entre otros clubes, falleció bajo los escombros de su vivienda en la “Residencia Ronesans”.
Llevaba desaparecido desde el primer día de los sismos, de 7,8 y 7,7 grados de magnitud, que han dejado más de 45.000 muertos en el sureste de Turquía y el norte de Siria.
Los estadios de la Premier honraron con un minuto de aplausos al jugador de Ghana, que militaba en el club turco Hatayspor en el momento de la catástrofe.
Además, los jugadores de varios equipos de la competición llevarán brazaletes negros en honor a Atsu.
En una declaración a los medios el gerente del Hatayspor, Fatih Ilek, dijo que Atsu había planeado dejar el club, y había comprado un billete de avión a Francia para el mismo día del terremoto, pero desistió de ese plan tras marcar un gol en el último minuto del partido contra el Kasimpasa de Estambul y canceló el viaje.
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“Tenía billete de avión, pero renunció a irse porque jugó bien y marcó. Le pilló un terremoto en su día más feliz”, comentó Ilek.
Taner Savut, el director deportivo del Hatayspor, también quedó bajo los escombros de la “Residencia Ronesans”, donde vivía Atsu, pero aún no se sabe nada de él.
La Federación turca de fútbol aprobó la retirada de las ligas de nueve equipos, incluido el Hatayspor (Superliga), que perdieron jugadores o sufrieron graves daños en los terremotos.