El Día del Orgullo Gay involucra a todo el espectro de segmentación del sentimiento humano. La comunidad LGBTQ celebra por igual este 28 de junio. Festejan los que a pesar de las adversidades siguen su lucha como minoría. Es día de desfile y también de reflexión, en el que el tema de la “reparación” tiene una enorme pertinencia.
Ser homosexual activa en otros mecanismos represores ancestrales. Cada vez son menos los homofóbicos y más los del grupo de la “homofilia”. Por cierto, este último vocablo fue acuñado por el astrólogo, autor y psicoanalista alemán Karl-Günther Heimsoth en 1924.
Puedes leer: Caucus LGBTQ de Penn solicita presupuesto para la salud mental
Ya que abordamos la atmósfera académica es menester citar a la profesora Paula Gerber. Ella dirige la cátedra de Derecho de los Derechos Humanos de la australiana Universidad de Monash. A juicio la directora de Kaleidoscope Human Rights Foundation “es tiempo de hablar de las reparaciones a los homosexuales”.
Definir la idea de reparación
Según la catedrática “tenemos que entender y aceptar el verdadero significado de la palabra”. Se requiere para “empezar a tener conversaciones genuinas sobre las reparaciones para las personas LGBTQ”. Ella los evalúa como “un grupo que ha soportado una larga y dolorosa historia de persecución en todo el mundo”.

Sus palabras representan a la junta directiva de Kaleidoscope Australia. También tienen la pátina de las atmósferas académicas. Paula Gerber precisa que las reparaciones a los homosexuales pueden adoptar numerosas formas. “Reparación suele implicar una disculpa formal del gobierno a la comunidad LGBTQ. La realiza por los errores cometidos en el pasado y una promesa de mejorar en el futuro”.
Las reparaciones a los homosexuales suelen incluir indultos a los condenados por el “delito” de serlo. Existen ejemplos de amnistía en el Reino Unido. Allí miles de hombres homosexuales y bisexuales fueron condenados por “indecencia grave” en el pasado.
“Ocasionalmente, las reparaciones a los homosexuales pueden implicar una compensación económica. Debido a los salarios o pensiones perdidos debido al tiempo pasado en prisión. También para los que recluyeron en una institución mental por un delito homosexual. Este tipo de compensación está disponible en España desde 2009 y en Alemania desde 2016”, relató Gerber.
Opositores a las reparaciones
Uno de los países donde se hace más resistencia a realizar actos de reparación es los Estados Unidos. Así lo precisa la académica australiana. Todavía hay 71 países que penalizan las relaciones sexuales consentidas entre homosexuales. La mitad de ellos son países de la Commonwealth. Sin embargo afortunadamente este número está disminuyendo.
“Parte de la oposición tiene su origen en la homofobia común y corriente. Las estadísticas muestran un aumento de los delitos de odio contra las personas LGBTQ en los últimos años”. Se muestra en las noticias de muchos países, incluidos el Reino Unido, Alemania y los Estados Unidos. “El discurso de odio homofóbico por parte de los políticos va en aumento en muchos lugares. En Polonia, casi 100 localidades se han declarado zonas ‘anti-LGBTQ’”.
Gerber busca refuerzos
De acuerdo a la profesora de Manash University “los argumentos contra las reparaciones a los homosexuales son más matizados”. Frente al tema recurrió al académico estadounidense Omar G. Encarnación. Él es autor del nuevo libro The Case for Gay Reparations (El caso de las reparaciones para los homosexuales). El profesor identificó cinco argumentos utilizados por los opositores a las reparaciones para los homosexuales:
- La persecución del pasado contra los homosexuales era legal y por ello no aplican reparaciones.
- Abre las puertas a reparaciones a cualquier persona que haya sufrido discriminación en la vida.
- Las reparaciones gay son divisivas. Llevan la política de identidad y el “victimismo” a un nuevo nivel.
- Hay pocas pruebas de daños intergeneracionales relacionados con la discriminación antigay.
- Son redundantes debido al éxito económico de la comunidad gay.
El orgullo de Victoria
Para esta oriunda de la Commonwealth, “Australia ofrece un modelo útil a replicar en cuanto a reparación se refiere”. En 2016, el primer ministro de Victoria, Daniel Andrews, por primera vez en el mundo, pidió perdón por las leyes homófobas del pasado en su estado. En un emotivo discurso dijo:

Puedes leer: Philly se muestra hostil frente a los derechos LGBTQ
“Hubo un tiempo en nuestra historia en el que convertimos a miles de jóvenes normales en delincuentes. Y fue un error profundo e inimaginable. […] Este parlamento y este gobierno deben rendir cuentas formalmente por haber diseñado una cultura de la oscuridad y la vergüenza. […] Lo sentimos mucho. Humildemente, profundamente, lo sentimos“.
Muchos podrán ver que con esas sinceras palabras se puede dar inicio a una nueva era de buenas relaciones.