El derrumbe del FC Barcelona y la Juventus de Turín, en los octavos de final de la presente edición de la UEFA Champions League, dejó al torneo sin el argentino Lionel Messi y sin el portugués Cristiano Ronaldo para los cuartos de final de esta competición, una situación inédita en los últimos 16 años.
La Juventus fue eliminada por el Porto y un día después, el FC Barcelona quedó afuera frente al Paris Saint Germain (PSG). Por lo tanto Ronaldo y Messi fueron alejados de la Champions League en octavos de final, una competición que no tendrá a ninguno de los dos en cuartos de final por primera vez después de más de una década.
No hay dudas de que está es una señal de lo que vendrá con jóvenes jugadores que ocuparán los lugares de las consolidadas estrellas más allá del vigor de Leo y de Cristiano. Y los que se asoman a calzar esos zapatos son Kylian Mbappé y Erling Haaland vistos como los máximos candidatos a dejar marcas imborrables en los próximos años y ocupar el trono del fútbol del que el argentino y portugués se empiezan a desprender.
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En la temporada 2004-2005, Messi sufrió la eliminación del Barcelona en octavos de final a manos del Chelsea. El argentino apenas había jugado un partido en dicho torneo por la fase de grupos y que no tuvo acción ante los británicos. Mientras que Ronaldo padeció la caída del Manchester United ante el Milan también en octavos de final. El portugués fue titular en ambos partidos que los italianos ganaron por 1-0 con goles de Hernán Crespo, actual entrenador de San Pablo.
Mientras tanto, Borussia Dortmund y París Saint-Germain siguen en carrera y podrían verse las caras en la próxima instancia de la Champions o más adelante. Ambos jugadores ya saben lo que es enfrentarse en el torneo continental tal como ocurrió la temporada pasada en octavos.