Redacción Agencias.- En el segmento de los Sport Utility Vehicle (SUV) medianos de lujo, donde Mercedes-Benz y BMW se disputan la cima con el GLE y el X5, vale la pena detenerse en la propuesta de Land Rover, específicamente el Range Rover Sport Td6, cuya producción se inició a mediados de la década pasada.
A diferencia de sus competidores, entre los que también se cuentan el Audi Q7 y el Volvo XC90, el ejemplar británico –que estrenó su segunda generación en 2014- cuenta con opción de motor diésel y tres versiones según equipamiento: SE, HSE y HSE Dynamic.
El ejemplar de prueba de versión intermedia comienza en $74,350 dólares, un valor $2,000 dólares superior al de su homólogo a gasolina. En cualquier caso, estaba repleto de opciones, incluidos múltiples paquete: el de climatización ($1,385 dólares) incluye techo panorámico deslizante, volante calefaccionado y control de clima de cuatro zonas; el drive pro ($ 1,630 dólares) trae monitoreo de punto ciego, control de crucero adaptativo y asistencia de mantenimiento de carril.
Otros muy interesantes son el paquete todoterreno ($1,785 dólares), con caja de transferencia de dos velocidades y ayudas enfocadas para fuera de la carretera; de remolque ($1,185 dólares); de asistencia visual ($2,255 dólares), que aporta luces altas automáticas, iluminación ambiental, pantalla de visualización frontal y cámara de 360 grados); el sistema de sonido Meridian ($1,120 dólares) y los asientos delanteros con calefacción y refrigeración ($815 dólares). Incluyendo un cargo de destino de $995 dólares, el precio total del ejemplar testeado era de $86,775 dólares.
Interior y tecnología
El interior de un Range Rover Sport evoca una extraña mezcla de sentimientos. Entrar requiere subirse, lo cual no es inusual para un SUV, pero una vez dentro se produce la sensación de estar en un deportivo gracias a los paneles de las puertas y el tablero de instrumentos. Este último es bastante alto y podría causarte inconvenientes si eres demasiado bajo.
Aquellos que esperan una copia del interior del Range Rover convencional, se sentirán decepcionados, porque el Sport no es tan opulento pero sí tiene su propio estilo. En cualquier caso, Land Rover no escatimó en el equipamiento tecnológico.
La unidad presenta el sistema de infoentretenimiento InControl Touch Pro Duo y utiliza dos pantallas táctiles de 10 pulgadas ubicadas en la consola central, complementadas por perillas multifuncionales para el control del clima y la calefacción de los asientos.
Una tercera pantalla de 12 pulgadas reemplaza al grupo de instrumentos análogos tradicionales, mientras que los controles del panel táctil están montados en el volante. La compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto viene de serie.
La cantidad de pantallas y superficies táctiles queda de manifiesto cuando el vehículo está apagado y el tablero es un mar de negro. Si presionas el encendido, todo se ilumina como las cámaras de los reporteros gráficos en la alfombra roja. La resolución es impresionante y las funciones clave para el control del clima, la navegación y el audio no requieren mucho trabajo. Sin embargo, la gran cantidad de páginas y menús puede hacer que otras funciones menos obvias sean difíciles de hallar.
Fuente:www.digitaltrends.com