El arzobispo de Miami, bendijo la escultura “Angels Unawares” dedicada a la inmigración, que permanecerá en un parque de esta ciudad hasta el próximo 8 de abril con el propósito de inspirar compasión y crean conciencia sobre las necesidades de los inmigrantes y refugiados.
“La historia de la humanidad es la historia de la migración y la de esta ciudad también”, dijo el prelado Thomas Wensky en la ceremonia que tuvo lugar en el Bayfront Park que dio la bienvenida a la monumental obra del canadiense Timothy Schmalz, que visitará varias ciudades de Estados Unidos. La próxima parada de la escultura será la ciudad de St. Paul, en Minnesota.
La escultura itinerante de cuatro toneladas de peso y seis metros de largo, es una réplica en bronce de una figura presentada en el Vaticano en 2019 y que fue develada en la Plaza San Pedro por el Papa Francisco.
“Angels Unawares” es la representación de un bote atestado de migrantes, imagen que no es ajena para los residentes del sur de Florida, manifestó Monseñor Wensky en una referencia a los balseros cubanos.
De la aglomeración de imágenes de bronce que personifican a migrantes de todas las procedencias y épocas, incluyendo a Jesucristo, San José y la Virgen María, sobresalen unas alas que indican la presencia de lo “sagrado”, comentó el prelado.
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El arzobispo Wensky confía en que las personas vean la obra recordarán a sus padres o abuelos inmigrantes que llegaron a territorio estadounidense en busca de una vida mejor, o rememorarán el viaje que ellos mismos hicieron en aras de una mejor calidad de vida.
En su bendición recordó que el nombre de la escultura está tomado de un versículo de la Biblia, del Libro de los Hebreos que dice: “No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles”.
Randolph NcGrorthy, director desde hace 30 años de los Servicios Legales Católicos, que prestan asesoría gratuita en asuntos migratorios y conocen mil casos por mes en sus cuatro centros del sur de Florida, dijo que es necesario un reconocimiento a la contribución de los migrantes pues en Miami el 55 % de sus residentes son nacidos en el extranjero.